La policía científica y la judicial de la Policía Nacional han localizado un décimo cuerpo en uno de los pisos quemados en el incendio de este jueves en el barrio de Campanar, en Valencia. Se trata del vecino de este complejo residencial que todavía constaba como desaparecido y cuya búsqueda ha concluido esta mañana del sábado de la peor manera posible. El hallazgo ha sido confirmado por la Delegación del Gobierno en Valencia.
Hasta ahora, las tareas de identificación de los cuerpos habían confirmado la muerte de nueve personas, cuatro de ellas de una familia formada por un joven matrimonio y sus dos hijos pequeños. Los servicios de emergencias atendieron a 15 heridos, siete de las cuales eran bomberos, y a estas alturas solos dos de las víctimas continúan hospitalizadas.
Este jueves, alrededor de las cinco y media de la tarde, dos torres de un complejo residencial, con un total de 138 pisos, comenzaron a arder, por motivos que a estas alturas se están investigando. En poco más de media hora, las llamas envolvieron ambos edificios, dejando a muchos vecinos atrapados, arrinconados por el fuego y el espeso humo que se concentraba en el interior de los bloques. Algunos de ellos pudieron ser rescatados a tiempo, como la pareja que resistió en el balcón de su casa hasta que los bomberos los pudieron bajar.
Recuperación de los cuerpos e identificación de los cadáveres
Efectivos de la policía española pudieron acceder al interior de los edificios calcinados este viernes al mediodía con tal de encontrar a las personas que figuraban como desaparecidas - el primer recuento oficial hablaba de entre nueve y quince personas que no se habían podido localizar. Finalmente, en la tarde del viernes, se confirmaba el hallazgo de nueve cuerpos y un desaparecido, que ha sido encontrado, también sin vida, este sábado a primera hora.
Cuatro equipos de forenses del Instituto de Medicina Legal (IML) de Valencia se hicieron cargo del levantamiento de los cadáveres. Se colocó una carpa cerca de los edificios quemados, donde se trasladaron los cuerpos a medida que los iban encontrando. Allí se recogían las muestras genéticas necesarias para hacer las comprobaciones de ADN y cotejando su información con los datos de sus familiares para poderlos identificar.
El juzgado de guardia de Valencia número 10 tiene abiertas las diligencias por este incendio en el barrio de Campanar que se ha cobrado la vida de una decena de personas, y ha decretado el secreto de las actuaciones. La magistrada titular tomó esta decisión después de recibir el avance del atestado policial para proteger la intimidad de las víctimas y de sus familiares. La investigación continua en marcha para determinar las causas exactas de este trágico incendio.