Una venta de 300 euros en joyas en una tienda de compraventa de oro en Sant Andreu de la Barca ha permitido a los Mossos d'Esquadra resolver un robo que todavía no se había denunciado. Los agentes de la Unidad de Investigación de la comisaría de Martorell inspeccionan, de forma habitual, estos puntos de venta, que por ley deben registrar todas las compras de joyas y oro, y registrarlas con el nombre y apellidos del vendedor. El pasado 21 de mayo, en el marco de estas inspecciones habituales, destinadas a la prevención de robos, se detectó que una sola persona había vendido joyas, con piezas de oro, por valor de 300 euros. Hasta aquí, todo podría ser normal, pero el vendedor, y sobre todo sus antecedentes, alertaron a la policía.

Se trata de un hombre con más de una decena de hechos delictivos a sus espaldas. Los agentes intervinieron las joyas y, gracias a las inscripciones que llevaban, pudieron localizar a su propietario. Él todavía no había detectado que le habían robado las joyas, pero al confirmarlo, lo tuvo claro. Alguien había accedido a un piso que tiene en la calle Dr. Zamenhof, en Barcelona, y se había llevado las joyas, que había colocado, de forma chapucera, en esta tienda de compraventa de oro, pensando que nadie lo relacionaría con los hechos, pero el cálculo le falló.

Limpió más de la cuenta

El trabajo que hacen los investigadores de los Mossos, sumado a los antecedentes, permitió aclarar que el sospechoso no había tenido un día de suerte. Las joyas habían sido robadas de este piso. ¿Pero cómo las había conseguido? Tampoco fue complicado aclararlo, tal como ha podido saber ElCaso.com de fuentes de la investigación. Con el propietario de las joyas localizado, se hizo un repaso de las personas que habían tenido acceso al piso. Se trata de un inmueble de esta calle del distrito de Sant Martí, que el pasado mes de marzo se incendió -una explosión de una bombona de camping gas, con algunos heridos. Después de hacer obras, la empresa que había hecho la rehabilitación subcontrató otra empresa para hacer la limpieza del piso.

Incendi SantMarti
Imagen del incendio, del mes de marzo, en el piso de donde fueron robadas las joyas / ElCaso.com

Entre las personas que la empresa envió al piso había un nombre conocido por los Mossos: el hombre que había vendido las joyas en Sant Andreu de la Barca. Todo encajaba. El hombre, supuestamente, fue a limpiar el piso después de las obras y se pasó y limpió más de la cuenta, llevándose un puñado de joyas que, vendidas en esta tienda del Baix Llobregat, le reportaron unos 300 euros. Con todos los indicios sobre la mesa, este lunes fue localizado y arrestado en Martorell, el hombre, de nacionalidad marroquí, de 47 años, está acusado de un delito de hurto en interior de domicilio. El hombre, que suma trece antecedentes, la mayoría por robos y hurtos, ha quedado en libertad. Las joyas que los Mossos intervinieron del establecimiento de compraventa de oro fueron devueltas a su legítimo propietario.