La Policía Local de Gijón ha detenido a un autodenominado falangista por haber amenazado con un revólver a los clientes y empleados de un bar de la localidad, después de haberlo echado por comentarios fascistas. El hombre, de 57 años, ha acudido este sábado por la tarde al establecimiento situado en la calle Linares Rivas, donde, después de que le sirvieran su consumición, ha empezado a decir que no quería "ni rojos ni maricones de mierda". Momentos después, a pesar de haber sido expulsado, ha vuelto con una pistola y ha encañonado al encargado, primero, y a un cliente que se había interpuesto entre ellos, después.
Un cliente muy agresivo
Después de que el hombre empezara a hacer comentarios vejatorios sin ningún tipo de provocación, incomodando al resto de los clientes, el encargado del bar le pidió que abandonara el local. El ahora detenido se negó, y entonces empezó una discusión entre él y el encargado que acabó con el hombre expulsado a la fuerza, después de haber lanzado un taburete contra su contrincante, intentando herirlo.
La cosa no quedó en eso, sin embargo, ya que el problemático cliente volvió a entrar pocos minutos después. En esta ocasión, llevaba en la mano un revólver cargado, con el que apuntó a los presentes, amenazándolos de muerte. En un momento determinado, se dirigió hacia el propietario, con quien se había peleado antes, apuntándolo con el arma. Un cliente, temiendo que fuera a dispararlo, se interpuso entre ellos. El hombre, entonces, lo encañonó.
Mientras todo eso pasaba, el encargado del bar se abalanzó contra él, y entre él y el otro cliente consiguieron reducirlo mientras esperaban la llegada de la policía. Finalmente, una patrulla se personó en el lugar de los hechos, y acabaron deteniendo al hombre, después de coger el revólver que todavía llevaba encima.