Dos jóvenes de Barcelona, de 19 y 24 años, han sido detenidos por la Guardia Civil por estar involucrados en una mafia neerlandesa que se dedicaba a estafar a gente mediante el engaño del "falso hijo". Este método consiste en contactar con las víctimas por WhatsApp haciéndose pasar por el hijo que ha tenido un problema, ha tenido que cambiar de móvil y necesita dinero para hacer un pago urgente. Los chicos eran los encargados de enviar los mensajes, y robaron más de 10.000 euros a tres personas de Navarra, Jaén y Melilla.

La investigación empezó el pasado 2023 a raíz de una denuncia interpuesta por un vecino de Valtierra que aseguró que una persona que se hizo pasar por su hijo le sustrajo 3.050 euros. Estirando el hilo, los policías identificaron ocho cuentas bancarias situadas en los Países Bajos, y se consiguieron bloquear 2.046,74 euros que fueron traspasados al depósito judicial. Después de varias pesquisas, se pudo identificar a ocho personas, cinco de Holanda, los dos jóvenes de Barcelona y una mujer de 42 años residente en Sevilla.

Tenían consolidada una red de estafas internacional

Los ocho identificados formaban una banda bien consolidada que tenía su base de operaciones en Róterdam y en Ámsterdam. Desde allí captaron a los tres delincuentes del Estado español, que colaboraron siendo los encargados de llevar a cabo la estafa. Para garantizar su éxito, vigilaban los movimientos de los hijos de las víctimas, y aprovechaban cuando estaban de viaje en el extranjero para cometer las estafas. Habitualmente, pedían el dinero para hacer frente a una emergencia médica o para poder comprar el vuelo de vuelta a casa después de que hayan tenido un problema con los métodos de pago habituales, como el móvil y la tarjeta física.

Aparte del denunciante de Navarra, los investigadores también localizaron a dos víctimas más en Jaén y en Melilla, con estafas por valor de 980 y 7.070 euros respectivamente. Paralelamente a las detenciones hechas en Barcelona y en Sevilla, también se dictó una Orden Europea de Investigación para poner a disposición judicial a los cinco miembros neerlandesas de este grupo.