Dos excursionistas de Barcelona han sido encontrados muertos este lunes por la noche en el pico del Carlit, en el Pirineu, después de perderse durante una tormenta de nieve el sábado, según informa AFP. Los cuerpos de los dos senderistas, de 54 y 56 años, han sido encontrados en el este del macizo por un helicóptero que sobrevolaba la zona.

Según informa la prensa local, los excursionistas, acostumbrados a hacer actividades de montaña, viajaron hasta los Pirineus desde Barcelona para hacer senderismo durante el fin de semana. Pero una tormenta de nieve los sorprendió y quedaron atrapados en la cumbre del Carlit, una montaña de 2.921 metros de altitud que se encuentra en la comarca de la Alta Cerdanya, a la Catalunya Nord. Los senderistas avisaron a los servicios de emergencia domingo por la mañana, después de pasar la noche en el raso al no poder volver en su alojamiento. A pesar de contactar, no fueron capaces de facilitar su ubicación exacta a las autoridades.

Las difíciles condiciones meteorológicas complicaron las tareas de los equipos de rescate, que se han alargado hasta este lunes con temperaturas de -25ºC y con rachas de viento de hasta 100 kilómetros por hora. Este lunes por la mañana, el dispositivo de búsqueda se ha reforzado, con más agentes especializados en rescates de montaña. A medida que han avanzado las horas, el tiempo ha mejorado y ha permitido utilizar dos helicópteros para inspeccionar la zona. Uno de estos vehículos ha localizado a los dos excursionistas, pero desgraciadamente, cuando los equipos de rescates han podido acceder a la zona, los han encontrado sin vida. Sus cuerpos se han podido recuperado y han sido trasladados hasta Perpinyà.

El aviso de los excursionsites

La unidad de rescate de montaña de CRS de Bolquère ha sido la encargada de la investigación y, según han explicado, recibieron la alerta de los senderistas de Barcelona el domingo hacia las 7.40 de la mañana. "Se perdieron y no nos pudieron proporcionar datos de ubicación. Estimaban, según su altímetro, que estaban a 2.700 metros", ha detallado uno de los agentes según recoge el medio Le Parisien.

El último mensaje que recibieron de los excursionistas fue que se habían refugiado dentro de sus sacos de dormir en una zona protegida del viento, que soplaba con fuerza. "Fue su último mensaje. Después se apagó el teléfono móvil", ha añadido el miembro de la unidad de rescate. Pero los dos hombres no pudieron sobrevivir a las condiciones meteorológicas extremas, que durante la noche de domingo a lunes se complicaron todavía más.