Sale a la luz una nueva prueba que podría ser determinante para averiguar quién es el autor del doble crimen de Almonte: se trata de una manta que no analizaron en el momento del asesinato y que sería clave para saber quién mató al hombre y a su hija en este municipio de Huelva.

Doble crimen de Almonte: asesinan a un padre y a su hija de 8 años

Los hechos se remontan al 27 de abril del 2013 cuando asesinaron a Miguel Ángel Domínguez y a su hija Maria, una niña de 8 años

Investigarán el ADN de una manta que no se investigó en el momento de los hechos

La investigación continúa abierta y los agentes tienen hasta el 29 de julio del año que viene para averiguar más detalles para aclarar los hechos. De momento, se están centrando en investigar detalladamente la manta con la cual fue tapado el cadáver de la niña, que tenía 104 puñaladas. Se trata de un elemento que no investigaron al detalle en su momento y que podría ser clave para resolver el crimen.

El crimen de las 151 puñaladas que marcó Almonte

Los cadáveres fueron encontrados en casa de Miguel y habían sido asesinados con mucha violencia: en total, sus cuerpos tenían en total 151 puñaladas. En un principio, los agentes pensaban que el hombre había asesinado a su propia hija y que, posteriormente, se había suicidado.

No obstante, esta hipótesis duró muy poco, ya que después de los análisis forenses y de las investigaciones policiales, descubrieron que los dos habían sido víctimas de un asesinato por parte de una tercera persona.

Francisco Javier Medina, el eterno sospechoso

Todas las investigaciones apuntaban hacia Francisco Javier Medina, que era el amante de Marianela Olmedo, madre de Maria y mujer de Miguel. Medina tenía un control absoluto sobre la Marianela: le controlaba la ropa y todos los pasos que daba. Olmedo decidió separarse de Miguel, ya que hacía años que estaba con Javier a escondidas.

Por este mismo motivo, decidió romper con su marido e irse a vivir con el amante. Javier, para poder seguir controlando en la Marianela, le pidió que cortara completamente el contacto con su exmarido, pero ella no lo hizo.

Encuentran ADN de Javier Medina en las toallas y miente a las declaraciones

Después de un año de investigaciones, la Guardia Civil encontró restos de ADN del Javier en tres toallas en casa de Miguel, que era uno se había producido el crimen. El presunto autor de los hechos entró en el domicilio sin forzar la puerta y apuñaló al hombre, que en aquel momento se estaba duchando y, posteriormente, asesinó a la niña: en total, les clavó 151 puñaladas.

Francisco Javier Medina era de Almonte y tenía acento de este municipio y, según los vecinos, que oyeron gritos y golpes el día del crimen, el hombre que estaba en casa de las víctimas, tenía acento de la localidad. Por si no fuera poco, Medina mintió en sus declaraciones diciendo que en el momento de los hechos estaba en el trabajo, pero era mentira.

Lo absolvieron por posible contaminación cruzada en las pruebas de ADN

El hombre estuvo ingresado en la prisión de manera provisional como presunto autor de los hechos hasta que se celebró el juicio popular, que a pesar de las pruebas presentadas, lo absolvieron por un informe que explicaba que los restos de ADN de Medina en las toallas podían ser por contaminación cruzada, ya que como tenía relaciones sexuales con Marianela y esta había utilizado las toallas con anterioridad, era posible que apareciera el ADN del hombre de manera indirecta.

El juicio fue "un auténtico despropósito por el alto número de pruebas con un altísimo contenido incriminatorio"

Así pues, ocho años después del crimen, todavía no se ha resuelto el doble crimen de Almonte y su asesino está en libertad. La Guardia Civil está convencida de que Franscisco Javier Medina es el autor de los hechos. La sentencia fue ratificada por el Tribunal Supremo, a pesar de la petición de Fiscalía del Supremo pidió que se repitiera el juicio, el cual definieron como un "auténtico despropósito por el alto número de pruebas con un altísimo contenido incriminatorio", explica Caso Abierto.