Los Mossos d'Esquadra de la comisaría de Reus detuvieron el martes en Montbrió del Camp a tres hombres acusados de delitos contra la libertad sexual de menores de edad, según ha podido saber ElCaso.com y han confirmado fuentes oficiales de la policía catalana y también desde el consistorio de Montbrió del Camp, donde residen los tres detenidos, los tres de nacionalidad española. También hay una cuarta persona, también hombre, también mayor de edad, investigado por los mismos delitos, aunque no fue arrestado.
Los detenidos, que después de pasar la noche en la comisaría de los Mossos d'Esquadra de Reus fueron entregados al juzgado de guardia de la capital del Baix Camp y quedaron en libertad con cargos, tienen relación con una empresa que se dedica a la gestión y organización de actividades de ocio para niños y jóvenes, la cual presta servicio a muchos ayuntamientos y entidades de la comarca y del Camp de Tarragona, según han confirmado también fuentes municipales de Montbrió del Camp.
A la espera de conocer más detalles de los hechos, y después de recibir varias denuncias, los Mossos d'Esquadra iniciaron una investigación que culminó el martes con la detención de los tres hombres, los tres vinculados, con diferentes roles, de dirección y monitores, a la empresa, y con la comunicación al cuarto, que también forma parte de la investigación como imputado. Los Mossos han recibido, según ha podido saber ElCaso.com, varias denuncias, una de ellas de una decena de chicas, en un escrito conjunto, donde detallan supuestos delitos relacionados con los tres arrestados cuando desempeñaban tareas de monitores y coordinadores de la empresa que gestionaba estos campamentos de verano, colonias y actividades extraescolares. No se han hecho públicos los detalles de la investigación ni los hechos concretos que investigan los Mossos d'Esquadra y que han denunciado en estas denuncias las víctimas.
La denuncia por parte de una de las víctimas a los Mossos d'Esquadra puso en marcha la investigación de la policía catalana. Según su relato, tanto los detenidos como el investigado habrían hecho uso de su superioridad para presionar en grupo a las chicas y coaccionarlas para que participaran en acciones que atentaban contra su libertad sexual. Así pues, en el contexto de reuniones, estancias y actividades que organizaban, se habrían producido besos y tocamientos, además de otras prácticas de carácter sexual. Con el paso de los años, las chicas se dieron cuenta de que habían normalizado ese tipo de comportamientos que eran constitutivos de agresión sexual. Cuando los abusos empezaron, las monitoras, que tenían menos de dieciséis años, tenían hasta quince de diferencia con los investigados.
Orden de alejamiento de las víctimas
Según ha podido confirmar fuentes judiciales de ElCaso.com, la causa está abierta contra los cuatro investigados por "agresión sexual, agresión sexual a menores de 16 años y acoso sexual." Además, el titular del juzgado de instrucción número 1 de Reus, que era el de guardia ayer, después de dejarlos en libertad –la fiscalía no solicitó el ingreso en prisión– ha ordenado una orden de alejamiento de 100 metros y la prohibición de comunicación con las víctimas por todos los medios, así como la prohibición de acudir a las colonias y actividades que organiza la empresa con la que están vinculados.
Uno de los arrestados, consultado por ElCaso.com, ha negado los hechos y ha asegurado que las diligencias e investigaciones policiales que se harán a partir de ahora confirmarán que todas las acusaciones que contienen las denuncias presentadas son "falsas". Sin embargo, no ha querido dar más detalles de la investigación, ahora por ahora.
Empresa vinculada a muchos pueblos del Baix Camp
Carmina Blay, alcaldesa de Montbrió, de donde son los tres detenidos y algunas de las víctimas, ha confirmado a ElCaso.com que tienen conocimiento de los hechos y ha explicado que durante el día de hoy emitirán un comunicado de prensa, aunque no facilitarán más detalles del caso, ya que, asegura, no tenía conocimiento de ellos. La alcaldesa, hasta hace pocos días responsable de la Secretaría General de Joventut de la Generalitat en Catalunya en el Camp de Tarragona, preguntada por este medio, asegura que no tenía ninguna información relacionada con estos supuestos delitos hasta que fue informada por los Mossos d'Esquadra. El consistorio, que no tiene ninguna relación contractual con la empresa actualmente, se ha puesto a disposición de las víctimas y también han creado un correo electrónico que harán público para recoger posibles denuncias y ponerse a disposición de las víctimas.
Según consta en la web de la empresa, varias escuelas, ayuntamientos y centros sociales son o han sido clientes. Entre otros, el Centro de Lectura de Reus, la escuela de Pratdip, escuelas de Cambrils, Riudecanyes y Tarragona, y los ayuntamientos de Riudecols, el Morell, Botarell, l'Aleixar, Maspujols o la Selva del Camp, entre muchos otros.