Los Mossos d'Esquadra han desmantelado este sábado una plantación de marihuana escondida en cuatro naves junto a la carretera N-230, entre la partida de Gualda de Lleida y Torrefarrera. Los agentes pudieron detener a tres jóvenes albaneses, de 24, 25 y 26 años, a quienes pillaron cuando estaban a punto de hacer la cosecha de las más de 3.500 plantas de este cultivo. Los arrestados, todos "jardineros", están acusados de un delito contra la salud pública y otro por defraudación del fluido eléctrico, ya que las naves tenían la luz pinchada.
Durante la mañana del sábado, la policía catalana desplegó agentes de la Unidad de Investigación, del Área Regional de Recursos Operativos (ARRO) y a los de Seguridad Ciudadana, según ha adelantado el diario Segre. Los tres chicos, que según todos los indicios serían los encargados de la custodia de la plantación, así como de asegurarse del correcto crecimiento de las plantas, fueron sorprendidos en plena faena, cuando estaban a punto de hacer la cosecha de la marihuana, y los arrestaron allí mismo antes de que pudieran escapar. La investigación continúa abierta y no se descartan más detenciones.
Proliferan las plantaciones de marihuana en el Segrià
Hace poco más de una semana que los Mossos d'Esquadra desmantelaron otra plantación de marihuana, en este caso, en el polígono industrial de Cometes, en Torrebesses. Cuatro hombres, también albaneses, fueron detenidos y acusados de pertenencia a grupo criminal, contra la salud pública y defraudación del fluido eléctrico. El cultivo fue localizado en una granja abandonada, que tecnificaron para acomodar un macrocultivo de cannabis. Por este motivo, habían pinchado una torre de alta tensión cercana a la granja. Dos de los arrestados quedaron en libertad con cargos aquel mismo día después de declarar en comisaría, mientras los otros fueron puestos a disposición del Juzgado de Instrucción en funciones de guardia de Lleida.