De Madrid a Catalunya y capturado en Platja d'Aro (Girona). La Policía Nacional de la Comisaría de Sant Feliu de Guíxols detuvo en el municipio gerundense a un joven, de 28 años y nacionalidad peruana, según han explicado fuentes policiales a ElCaso.com, por delitos de violencia de género, lesiones, atentado a agente de la autoridad, conducción temeraria y resistencia y desobediencia. El dispositivo para localizarlo y arrestarlo se llevó a cabo de forma conjunta con la Policía Local de Platja d'Aro, tras tener conocimiento que el multirreincidente había sido detectado en la localidad en compañía de otros individuos conocidos por los agentes y con numerosos antecedentes. Finalmente, ha sido expulsado a Perú.

Los agentes de la Policía Nacional comprobaron que el chico se encontraba en situación irregular en España y que, además, tenía una orden de expulsión dictada por la Subdelegación del Gobierno en Madrid. El historial del arrestado era largo: violencia de género, robos con fuerza o conducir bajo los efectos del alcohol, entre otros. Pero, lo más curioso del caso, quizás, es que cuando se dictó la orden para enviarlo a su país de origen, al parecer, el joven decidió irse de la capital y acabó en Catalunya, concretamente en Platja d'Aro, juntándose con otros individuos con numerosos antecedentes.

Expulsado a Perú

Una vez arrestado y confirmada la orden de expulsión por el Grupo Operativo de Extranjeros de la Comisaría de Sant Feliu de Guíxols, fue puesto a disposición judicial. El Juzgado de Instrucción en funciones de guardia dictó el traslado del multirreincidente al Centro de Internamiento de Extranjeros (CIE) de Barcelona, donde permaneció hasta que se materializó su expulsión a Perú. La labor de los equipos de extranjería de la Policía Nacional tiene como objetivo principal actuar contra la multirreincidencia y proceder a la expulsión de ciudadanos extranjeros irregulares que cuentan con antecedentes policiales y condenas firmes.