Nuevos testigos han dejado todavía más contra las cuerdas un quiromasajista de la Bisbal d'Empordà investigado por abusos sexuales a menores. Este hombre, de 52 años, fue detenido el pasado mes de junio después de que una chica de 15 años denunciara que le había hecho tocamientos durante una visita como cliente al espacio que tenía habilitado en los bajos de su casa. Según el relato de la menor, el hombre la hizo desnudar y empezó a tocarle las partes íntimas. Posteriormente, el masajista también se desnudó y le dijo que le hiciera un masaje en los genitales. Al negarse, la obligó a tumbarse a su lado, los dos desnudos.
Esta primera denuncia a los Mossos d'Esquadra hicieron que el sospechoso fuera detenido el pasado 22 de junio como presunto autor de un delito de abuso sexual. Después pasar a disposición judicial y acogerse a su derecho de no declarar, el magistrado del juzgado de instrucción 2 de la Bisbal d'Empordà decretó su puesta en libertad. La detención, sin embargo, sirvió para que otras víctimas del hombre se atrevieran a dar el paso y también fueran a la comisaría de los Mossos d'Esquadra para denunciar que eran víctimas de unos hechos similares por parte del investigado.
Dos víctimas más deciden ir a los Mossos a denunciarlo
El primero de estos nuevos testimonios es el de una mujer que explicó a los investigadores que a ella también le había hecho tocamientos en los pechos y en los genitales cuándo tenía 12 años. En su caso, sin embargo, los hechos se habían producido ya hacía años y habían prescrito, motivo por el cual ya no se podía presentar una denuncia. Sí que se podía presentar en el caso de una segunda menor que también fue hasta las dependencias policiales para decir que este hombre había abusado sexualmente de ella.
Según explicó a los agentes, los hechos habían tenido lugar el pasado 1 de mayo, pocas semanas antes de los hechos por los cuales se lo había detenido. La chica se encontró con el quiromasajista en un club deportivo y el hombre le empezó haciendo un masaje en los hombros para ir bajando poco a poco sus manos hasta acariciarle los pechos. Además, la intentó convencer para que fuera a su casa como cliente para seguir con el masaje. Los Mossos han abierto diligencias por estas nuevas denuncias y lo ha puesto en conocimiento del juez que lleva el caso. No se descarta que pueda haber más víctimas.