Novedades del crimen de Baronia de Rialb (Lleida): Joan, el empresario asesinado, murió por un tiro en el pecho que disparó un francotirador desde la distancia. Estaba escondido esperando el momento ideal para dispararlo. Fue un operario que trabajaba para la víctima quien encontró el cadáver de este hombre de 60 años que, posiblemente, lo mataron por venganza, unos hechos que están siendo investigados.

Joan Coromina Estany era un vecino de Oliana (Lleida) que fue asesinado hace una semana en Baronia de Rialb. El crimen pasó en una zona rural, sin cámaras de seguridad ni ningún testigo.

Lo que los investigadores tienen claro es que se trata de un asesinato a sangre fría: un francotirador se escondió en el bosque esperando el momento perfecto para asesinar a este conocido empresario: lo mató de un tiro en el pecho con un rifle, que el autor de los hechos disparó desde la distancia.

Una venganza relacionada con sus negocios: el posible móvil del crimen

Coromina era un hombre de negocios y se dedicaba a la compraventa de fincas e inmuebles en diferentes comarcas catalanas, concretamente en El Barcelonès, en L'Alt Urgell y en El Solsonès. La víctima manejaba grandes cantidades de dinero y tenía negocios en el lugar donde fue asesinado, explica El Segre.

Un trabajador de la víctima alertó de los hechos a Emergencias

De hecho, fue uno de sus trabajadores la primera persona que vio el crimen: estaba trabajando por la zona con una excavadora y decidió hacer una pausa para ir a comer, cuando, de repente, vio a su jefe asesinado de un tiro en el pecho e, inmediatamente, avisó a Emergencias 112.

El crimen de Baronia de Rialb (Lleida) fue a sangre fría: un francotirador se escondió en el bosque y disparó a la víctima desde la distancia, matándola de un tiro en el pecho / ACN

Un crimen a sangre fría y sin ningún detenido: posible sicario

Los Mossos d'Esquadra abrieron una investigación para averiguar los detalles y aclarar los hechos. De momento, no hay ningún detenido y, aunque no descartan ninguna hipótesis, todo apunta que se trata de una venganza relacionada con sus negocios, ya que fue un crimen a sangre fría: el asesino no discutió con él momentos antes de ejecutarlo, sino que lo hizo desde la distancia, sin decir ninguna palabra con la víctima.

Joan Coromina Estany

Joan Coromina Estany era un conocido empresario de su sector, sobre todo en Andorra. Actualmente, estaba viviendo en Cervera (Lleida) y era una persona reservada con respecto a su mundo laboral: no comentaba a mucha gente a qué se dedicaba. Los policías no descartan que la haya matado un sicario, una hipótesis que todavía no ha sido 1000% corroborada.