El cónsul general de la República Dominicana en Barcelona, César Baltazar Méndez Pérez, ha explicado a ElCaso.com los hechos del pasado domingo, cuando fue denunciado por la Guardia Urbana de l'Hospitalet de Llobregat por haberse negado a hacer la prueba de alcoholemia después de un accidente de tráfico en esta ciudad. Tal como adelantó este medio, el hombre chocó contra otro vehículo y durante la discusión con la conductora del otro coche, y cuando llegó una patrulla de la policía de l'Hospitalet, el hombre se negó a hacerse la prueba de alcoholemia que los agentes creyeron oportuno hacerle por el estado, siempre según la versión de la policía, del hombre.
Después de los hechos, y en ser identificado como miembro del cuerpo consular y de ir a bordo de un vehículo también de esta categoría, los agentes lo denunciaron, pero no lo detuvieron, ya que según el Tratado de Viena, sobre los miembros diplomáticos, disfruta de inmunidad y no puede ser arrestado si no se trata de delitos graves. La policía, el lunes por la mañana, presentó al juzgado de guardia las diligencias y tendrá que ser ahora el juez quien decida por qué delitos acaba imputado por negarse a someterse a la prueba de alcoholemia y también por resistencia a la autoridad.
El cónsul no sabía que era obligado soplar
Según la versión que ha dado al cónsul en una conversación con ElCaso.com, acepta que se vio implicado en un accidente, que asegura que fue muy leve, y que cuando llegó la patrulla de la policía local de Hospitalet de Llobregat, cuando le dijeron que tenía que someterse a la prueba creyó que por su cargo diplomático no estaba obligado, y que, por lo tanto, se negó a ello. "Si hubiera sabido que en mi caso, como diplomático, era obligatorio someterme a un procedimiento, cómo es la detección de alcohol, en un proceso penal, lo habría hecho, pues no tenía ni tengo voluntad de transgredir las normas del Estado español. Tampoco acostumbro a beber más allá de una copa social, hecho por el cual, con toda seguridad, la prueba habría salido negativa," asegura César Méndez.
Más allá de esperar ahora la resolución judicial y también de haber informado a la Embajada de la República Dominicana en España, que fueron alertados por parte de la Guardia Urbana de Hospitalet de Llobregat, el cónsul en Barcelona ha pedido disculpas "por mi ignorancia" en sí se tenía que someter o no a la prueba de alcohol. También lo hizo de manera presencial a la comisaría de la Guardia Urbana, tal como ha explicado él mismo a ElCaso.com.
Noticia en República Dominicana
La noticia que avanzó ayer ElCaso.com ha saltado el Atlántico y medios caribeños ya informan del incidente que protagonizó al cónsul a Barcelona. Según el Diario Libre, la embajada en Madrid está esperando información sobre el caso y está "investigando" los hechos. Hoy por hoy, a pesar de haber sido requeridos por este medio y por los medios dominicanos, el embajador todavía no ha aclarado si César Méndez, hijo de Los Ríos, y residente en España desde hace catorce años, será amonestado o destituido de su cargo diplomático.