Un conflicto vecinal por un muro que se hundió hace dos años ha acabado con dos personas muertas este lunes en Calpe (Alicante). Un hombre francés de 47 años ha matado a tiros al inquilino del adosado del lado, un joven español de 32 años, y después se ha quitado la vida con la misma arma. El crimen tuvo lugar poco antes de las diez de la mañana en la urbanización Maryvilla, donde el hombre asesinado era presidente de la comunidad. Un vecino alertó a los servicios de emergencias después de sentir varios disparos, y hasta el lugar se desplazaron patrullas de la Guardia Civil y de la Policía Local de Calpe.
Según han podido averiguar los investigadores, los dos hombres tenían un litigio abierto por la caída del muro que separaba sus parcelas, pero nadie se hubiera imaginado que este conflicto desencadenaría una tragedia. El joven muerto a tiros era un conocido arquitecto de la zona, José Pineda, y su verdugo, un francés que hacía tiempo que vivía en Calpe, identificado solo como Bruno. Esta persona habría disparado dos veces contra Pineda antes de volver a su casa y suicidarse.
La Guardia Civil ha abierto una investigación al respecto bajo la batuta del Juzgado de Instrucción número 2 de Denia. Los agentes han podido recuperar la pistola con la que se cometió el asesinato-suicidio, y han informado de que el presunto homicida no tenía permiso de armas.
Un crimen que ha golpeado a la comunidad
La confirmación de las muertes ha sido un choque para la comunidad de vecinos de la urbanización, que no acaban de entender cómo ha podido pasar una cosa así. José Pineda era muy conocido, no solo entre la comunidad que presidía, sino también en Calpe; pertenecía a una familia del pueblo de toda la vida y había trabajado en el ayuntamiento durante unos años.
La alcaldesa, Ana Sala, ha decretado tres días de duelo oficial con las banderas de todos los edificios oficiales a media asta y un crespón negro. También se han suspendido todos los actos públicos organizados por el ayuntamiento durante los próximos días.