Una cocinera denuncia que la han suspendido durante dos meses de empleo y sueldo por "comerse una pizza" mientras trabajaba en un restaurante de Lleida. Se trata de una cadena de restauración situada en la capital ilerdense y, al parecer, lo hizo durante su jornada laboral. La mujer ya ha presentado una denuncia ante Inspecció de Treball, la cual le ha ofrecido iniciar un acto de conciliación con la empresa para poder resolver el caso. Pese a ello, la compañía tendría registradas otras faltas graves de la trabajadora que habrían hecho imponer esta sanción durante 60 días.

La mujer, al comerse la pizza, habría provocar "pérdidas" para el negocio, según ha explicado Segre. Además, después de acabar su jornada laboral se habría quedado en el establecimiento de restauración tomando unas bebidas. Por todo ello, ha presentado la correspondiente denuncia ante Inspecció de Treball por haber sido suspendida de empleo y sueldo durante dos meses. Sin embargo, la explicación de este procedimiento vendría de lejos. Tal y como explica el rotativo citado, el director de la firma de restaurantes de Lleida ha asegurado que se llegó a este extremo porque ella acumula "un gran número de faltas graves por saltarse los protocolos".

Una década entre fogones en Lleida

La cocinera lleva más de diez años trabajando en la cadena de restaurantes y cafeterías, lo cual implica que tendría que conocer perfectamente los protocolos externos e internos de la empresa. Pero los representantes de la compañía recuerdan que, entre las infracciones de la mujer, se encuentra la de quedarse en el local como cliente cuando ha finalizado su servicio, cosa que no permite la normativa o que las pizzas no están entre los productos que los trabajadores pueden consumir gratis mientras están en el trabajo. "Las faltas que acumula podrían ser perfectamente motivo de despido", sentencia la dirección de la compañía, que finalmente ha optado por la sanción de suspenderla dos meses de empleo y sueldo.