Importante golpe de los Mossos d'Esquadra contra un clan familiar que se había hecho fuerte al barrio de Sant Roc de Badalona vendiendo cocaína al detalle. Se han detenido 14 mujeres y 29 hombres en entradas y cacheos en pisos y despachos de Badalona, Sant Adrià de Besòs, El Vendrell, Calafell y Barcelona. De los arrestados, que funcionaban como una red criminal organizada, que aparte de la venta de droga se había especializado en el blanqueo de los capitales, once han ingresado a prisión y la mayoría han quedado en libertad.
Desde final de 2020 que agentes de la Unidad de Investigación de la comisaría de Badalona iban detrás de este entramado criminal que tenía su epicentro en un piso de la calle de Córdoba del barrio de Sant Roc de Badalona, un punto abierto las 24 horas del día para vender, sobre todo, cocaína y que podía generar ingresos, cada día, de 15.000 euros, según los investigadores. Los policías fueron estirando el hilo hasta este mes de julio, que se ha podido explotar el caso bautizado como Palma. Más de 450 agentes de los Mossos, entre ellos agentes del Área Regional de Recursos Operativos (ARRO) y de la Brigada Móvil (Brimo) asaltaron varios pisos, la mayoría en Badalona.
Comercio de proximidad: gente del barrio de toda la vida
Los investigadores de los Mossos d'Esquadra pudieron llegar a saber que el grupo que se dedicaba en venta de la droga y al blanqueo del dinero generados del narcotráfico, siempre en ventas al detalle, estaba formado por dos ramas, que se habían aliado, como si se tratara de una UTE de la droga para introducir cocaína en el barrio y colocarla.
Los investigadores supieron que la organización estaba formada por dos grupos independientes que se habían aliado con el objetivo de obtener beneficios importantes de la venta de la droga, una rama, de nacionalidad española, arraigada en el barrio desde hace muchos años que proporcionaba la infraestructura y varios vigilantes y vendedores, y otra rama de personas de nacionalidad dominicana que eran los encargados de proporcionar la droga que era vendida en el barrio.
"Cocineros" para alargar la droga
Entre los roles que los Mossos han detectado que tenían los integrantes de esta banda criminal formada por personas de etnia gitana y personas de nacionalidad dominicana estaba la parte de arriba, que se encargaba de comprar la droga y organizar la venta, pero también los "cocineros" que manipulaban la cocaína para adulterarla y conseguir más producto para venderlo al comprador final.
La organización tenía un grupo especializado en dosificar la droga papelinas listas para ser vendidas y transportaban la sustancia del domicilio donde se cocinaba hasta el lugar donde la dosificaban y finalmente en el punto de venta. También había uno de los miembros de la banda que eran solamente vendedores, que se encargaban de tener preparado el punto de venta, prestando también la atención al cliente, y otros que su misión era dar protección en el piso. A algunos de ellos los pagaban con la misma droga.
Especialistas en blanquear el dinero de la droga
También habían diseñado un equipo que se encargaba de blanquear los beneficios económicos provenientes de la venta ilegal de la droga. Aquí está donde centraron esfuerzos los agentes de la Unidad Central de Blanqueo y Delitos Económicos (UCBE), con sede en Egara y especializados en la guerra contra el narcotráfico por la zona más sensible, por la cartera de los delincuentes para no únicamente reventar los puntos de venta, también todas las estructuras que utilizan para blanquear el dinero que gana de manera presuntamente ilícita con la venta de la droga.
Los investigadores de la UCBE pudieron comprobar que los miembros de la banda|lado, la mayoría con antecedentes delictivos, habían hecho pagos en metálico o ingresos en efectivo en tarjetas monedero para comprar aquello que les hacía falta. Para pasar desapercibidos utilizaban sociedades pantalla o personas interpuestas con el fin de esconder a quien había detrás. De hecho, en ninguna de las grandes compras que hacían solicitaban préstamos bancarios para financiarlas y se pagaban en efectivo, asumiendo gastos superiores a los 500.000 euros. Los Mossos ha podido hacer aflorar hasta cuatro grandes operaciones de inmuebles y coches con las cuales blanquearon aproximadamente 757.800 euros, según fuentes de la UCBE.
Miles de euros en efectivo
En las entradas y cacheos en pisos y despachos profesionales los agentes localizaron 5 kilos de cocaína, 4 kilos de sustancias de corte, productos típicos para la adulteración y material de embalaje y de pesaje. A más, 194.095 euros en efectivo, seis armas de fuego cortas, un rifle, una escopeta recortada y 162 cartuchos. Además, y eso es relevante, se intervinieron doce inmuebles y once vehículos, algunos de gama alta, además de bloquear cuentas corrientes de varias personas.
Después de pasar a disposición del Juzgado de Instrucción número 2 de Badalona, se decretó prisión para once de los arrestados y la libertad con cargos para los otros. Todos están acusados de delitos de pertenencia a organización criminal, delitos contra la salud pública en la modalidad de sustancias que causan un grave riesgo para la salud y del delito de blanqueo de capitales.