Acuerdo en la Audiencia de Tarragona entre la fiscalía, la defensa y la acusación particular para absolver a la chica de 30 años que mató, durante una discusión, a su madre de 64 años en Tarragona el 22 de octubre de 2019. La chica, a quien se ha aplicado una eximente completa de alteración psíquica, tendrá que pasar once años internada en un centro psiquiátrico.

Durante un enfrentamiento entre las dos, la chica mató a su madre, de quien creía que estaba "poseída por el diablo". Según las pruebas forenses que se practicaron a la víctima, su hija le había clavado un total de 20 cuchilladas. Las dos, madre e hija, vivían en un piso de esta calle del barrio del Serrallo de Tarragona. Las dos no tenían trabajo y vivían de la pensión que cobraba la madre.

La chica sufría un trastorno esquizoafectivo que en varias ocasiones había hecho que la ingresaran al hospital, tanto por descompensaciones del ámbito psicótico como del estado de ánimo de intentos de autólisis. Aunque tenía prescrita una medicación para su tratamiento, lo había abandonado repentinamente como mínimo varios días antes de los hechos, lo cual la sumergió en un delirio de tintes psicóticos, con delirios mesiánicos y síndrome de Capgras –consistente en reconocer perfectamente el rostro de una persona, pero detectar "alguna cosa extraña" en ella o tener la sensación de angustia al sentir que la persona que conocían perfectamente parecía haber sido sustituido por otra, según detallan los informes médicos aportados por la fiscalía para avalar la alteración psiquiátrica de la autora del asesinato de su madre.

La madre estaba "poseída por el diablo"

Según relata la Fiscalía, en su escrito de acusación, dónde ya pedía absolver a la chica, en torno a la medianoche del 22 de octubre de 2019, cuando se encontraban en casa, la madre empezó a discutir con la hija porque esta se oponía a que la joven saliera de la vivienda. Durante la discusión, la acusada debido a su patología psiquiátrica creía que la madre estaba "poseída por el diablo", y decidió acabar con su vida, por lo cual cogió tres cuchillos de la cocina, se dirigió al dormitorio y le clavó varias cuchilladas en el cuello y en el tórax con al menos dos de estos cuchillos -de 20 y 10 centímetros de hoja.

Felipe Pedrell - Tarragona

Imagen del exterior de la casa donde vivían la madre y su hija y asesina / ACN

Ella misma también se infligía lesiones apuñalándose en antebrazos, muñecas y en el pecho. La mujer presentaba una veintena de heridas y contusiones. La mujer murió como consecuencia de un choque hipovolémico y hemorrágico, según el autopsia.

Ella avisó a una tía

Hacia las doce y media de la madrugada del 22 de octubre de 2019, la acusada llamó a sus hermanas en varias ocasiones, sin obtener respuesta. Igualmente, acto seguido consiguió hablar con la tía y le dijo que "creía que había matado a su madre", por lo cual decidió acudir al domicilio. Sin embargo, la acusada no quiso abrirle la puerta y alertó a la policía.

Agentes de los Mossos accedieron al inmueble poco después de la una de la madrugada y tuvieron que llamar a los Bomberos para que abrieran la puerta, que estaba cerrada con llave. En el dormitorio de la acusada los agentes la encontraron manchada de sangre y sentada en los pies de la cama junta con el cuerpo sin vida de su madre, en medio de un gran charco de sangre. Sobre la cama encontraron un cuchillo de cocina con hoja de sierra y sobre la mesilla de noche otros dos cuchillos.

Intento de sucidi de la chica: ingresada a Pere Mata

Cuando los servicios médicos la atendieron la acusada manifestó que se había querido suicidarse cortándose las venas porque había discutido con su madre, pero que las heridas se le habían cerrado y que había clavado el cuchillo a su madre en el corazón.

Como la chica presentaba un cuadro psicótico descompensado, después de curarla la ingresaron inmediatamente en la unidad de agudos del centro psiquiátrico Pere Mata de Reus.

Del Pere Mata a Brians 1

En el momento de cometer los hechos la acusada tenía sus capacidades cognitivas, volitivas e intelectivas anuladas como consecuencia del cuadro psicopatológico anteriormente descrito. Una vez recibió el alta, el 13 de mayo de 2020, la mujer ingresó en prisión provisional en la unidad de hospitalización psiquiátrica penitenciaria de la prisión de Brians 1.

A la mujer la han absuelto del delito de homicidio porque aplican la eximente completa de alteración psíquica. La Audiencia ha acordado la medida de seguridad privativa de libertad de internamiento para tratamiento médico en un centro psiquiátrico adecuado a su patología por un plazo de once años. Además, se le aplicará también la medida de libertad vigilada por un plazo máximo de 10 años cuando pueda salir del centro. La condenada no se podrá acercar a menos de 300 metros de las hermanas ni comunicarse con ellas durante 10 años, y tendrá que indemnizar a cada una de las dos con 120.000 euros.