El caso Madeleine McCann, que este año cumplirá quince años, empieza a ver la luz al final del túnel. El alemán Christian Brueckner, principal sospechoso del secuestro en 2007 de la niña en el Algarve, ha sido finalmente imputado por las autoridades alemanas, de donde es originario, a petición de la Fiscalía portuguesa. El hombre es un conocido pederasta de Alemania que se encuentra en la cárcel por otros delitos, y hace años que se le considera autor de los hechos hasta que hoy se ha hecho oficial.

Imputado Christian Brueckner por el caso de Madeleine

Así lo han informado las autoridades alemanas este jueves por la noche, así como la Fiscalía de Faro, que ha emitido un comunicado en su página web explicando que Brueckner ha sido imputado en aplicación de una petición de cooperación judicial internacional emitida por el ministerio Público de Portugal. Así, la investigación sigue a cargo de una cooperación entre el Departamento de Investigación y Acción Criminal de Faro (DIAP) y la Policía Judicial, con las autoridades inglesas y alemanas.

Christian Brueckner caso Madeleine / Cedida
Christian Brueckner ha sido ahora imputado por el caso Madeleine / Cedida

El cerco se estrechaba hace ya tiempo sobre el alemán, que tiene antecedentes por pedofilia y actualmente se encuentra en una cárcel de Alemania cumpliendo condena por tráfico de drogas. Y es que su historial delictivo es bastante largo, incluyendo robos, drogas y delitos sexuales. Prueba de ello es el testimonio destapado recientemente de un amigo suyo, que rompía su silencio hace apenas dos semanas, revelando que estaba totalmente seguro de que fue Brueckner quien acabó con su vida.

El testimonio de un amigo que dio un giro al caso

Christian Post, de 54 años, conoció al presunto asesino de Madeleine, de tres años, en Praia da Luz, en el Algarve, donde tuvo lugar la desaparición de la niña británica, que estaba de vacaciones junto a su familia y fue sustraída de la habitación de hotel en la que dormía junto a su familia. Las declaraciones de este hombre dieron un giro al caso, que está a punto de cerrarse tras quince años sin respuestas a todas las preguntas que se han ido formulando.

Madeleine McCann / EFE
Madeleine McCann desapareció en el Algarve en 2007, cuando tenía tres años / EFE

Post explicaba al medio británico The Mirror que creía que el que era su amigo, Christian Brueckner, encontró por casualidad a Madeleine McCann durante uno de los robos que llevaba a cabo en los resorts portugueses de la zona costera. Según su testimonio, el pedófilo y principal sospechoso de la desaparición -violación y asesinato- de la pequeña, se la llevó en uno de sus golpes, de los que solía presumir ante su amigo.

De hecho, el hombre asegura que el propio Brueckner se reía de los robos que llevaba a cabo en pisos vacacionales en recorridos nocturnos por el resort en el que desapareció la niña, incluso acumulando hasta cien pasaportes de las casas en las que entraba a robar. Christian Post asegura también que se arrepiente de no haber informado a la policía de lo que sabía, aunque ahora está dispuesto a ayudar a llegar al fondo del asunto y que la justicia caiga sobre el presunto asesino.