Caos en el centro de Reus este miércoles, 1 de octubre, por la tarde. Los Mossos d'Esquadra y la Guàrdia Urbana de la capital del Baix Camp montaron un dispositivo por los alrededores de la plaza de la Llibertat para poder arrestar a un hombre quien tenía una orden de detención pendiente. Hacía unos días que la policía catalana lo tenía controlado y vigilado y, sobre las siete de la tarde, decidieron actuar. La intervención no salió como se esperaba: una mujer, supuestamente, la pareja de la persona en busca y captura, se encaró con los agentes de manera muy violenta y el alboroto permitió que el hombre escapara

La actuación de los dos cuerpos policiales generó mucha expectación entre los vecinos, a quienes alarmó la gran presencia policial, con varios coches patrulla y también de la policía secreta que se estuvieron bastante rato, bloqueando las calles para impedir que el sospechoso huyera. Cuando ya lo tenían localizado, sin embargo, la mujer, de unos 30 años, según ha podido saber ElCaso.com, atacó a los agentes, evitando que llegaran hasta el hombre que buscaban, quien echó a correr para escabullirse. A pesar de la persecución que se inició, no lo pudieron atrapar y, a estas alturas, continúa en paradero desconocido

Un agente de los Mossos herido durante el altercado 

En el enfrentamiento con la mujer, muy agresiva, uno de los agentes de los Mossos d'Esquadra que intervinieron resultó herido de carácter leve, afortunadamente. Ella también intentó escapar en un momento dado, pero la atraparon en la calle de Recs y la detuvieron por un delito de atentado contra los agentes de la autoridad. El amplio despliegue se retiró poco después de hacerse este arresto y el barrio volvió, poco a poco, a la normalidad. 

De momento, no han trascendido los motivos por los cuales el fugitivo estaba en busca y captura por los Mossos, aunque, según parece, podría tratarse de algún tema relacionado con el tráfico de drogas, según ha avanzado el Diari de Tarragona

Que familiares o conocidos intenten evitar una detención no es nada nuevo. Este martes, un joven de 22 años intentó herir a agentes de la Policía Local de Tortosa que querían detener a su primo que se había fugado de un control de tráfico. Los chicos, de origen magrebí, acabaron arrestados, finalmente: uno, por atentado contra los agentes y desobediencia grave, y el otro, por un delito contra la seguridad del tráfico, por conducción temeraria y por haber cogido la moto sin tener el permiso de conducir.