Casi treinta robos hacen crecer al más cauto de los ladrones. Pero la confianza en uno mismo a veces provoca descuidos, especialmente si hay tecnología de por medio. Un joven de 25 años, especializado en entradas a domicilios y que actuaba en varios distritos de la ciudad de Barcelona, ha sido pillado después que unos auriculares inhalámbricos que sustrajo marcaran exactamente el domicilio donde residía. Los Mossos d'Esquadra lo detuvieron el pasado 31 de enero y le acusan de 29 robos con fuerza, además contaba con diez antecedentes por hechos similares y relacionados con delitos de patrimonio.
La investigación policial se inició en julio del 2022 cuando los agentes tuvieron conocimiento de una serie de robos con fuerza en pisos de la capital catalana. Su radio de actuación era diverso, casi en toda Barcelona, y consiguió consumar las entradas en las viviendas en los distritos de Nou Barris, Eixample, Horta, Sant Andreu, Les Corts y Gràcia. Los Mossos d'Esquadra le siguieron muy de cerca los últimos meses y, aunque las informaciones e indagaciones realizadas por los agentes permitieron la detención, el hecho de que los auriculares inhalámbricos de una de las víctimas señalaran el lugar donde se encontraban después de su sustracción fue crucial para identificar el domicilio del delincuente.
Así actuaba robando por Barcelona
Al principio, el arrestado actuaba con la ayuda de otras personas, según ha explicado la policía catalana. Sin embargo, a finales del año pasado empezó a cometer los robos solo y sin la necesidad de terceros. Esto no lo echó para atrás, sino que incrementó su actividad delictiva en Barcelona durante enero de este año e incluso en una sola noche fue capaz de realizar nueve entradas en pisos que estaban relativamente cerca entre ellos. El otro punto clave es que, una vez sustraía los objetos de valor y el dinero de los inmuebles, normalmente volvía a casa o se desplazaba hacia otro objetivo en transporte público.
Los marcadores son muy utilizados por los ladrones: los colocan en las puertas para saber si alguien las abre y así saber si los residentes están fuera o de viaje unos días. Así, una vez constatado, accedía a los domicilios y sustraía aparatos electrónicos, pequeños electrodoméstico, joyas y otros objetos valiosos. Y la electrónica y la tecnología lo delató al llevarse los auriculares inhalámbricos y con ubicación GPS de una de las víctimas, que mostró los agentes donde indicaba que estaban en aquel momento: en el piso del detenido.
Detención y puesta en libertad
Pero el arresto, a pesar de la cantidad de robos en viviendas, tardó unos días. Cinco antes, concretamente, el presunto autor fue identificado por los Mossos d'Esquadra cuando caminaba por la calle con una bolsa y una caja de grandes dimensiones. En el registro en dependencias policiales, aunque el hombre manifestaba que llevaba ropa entre sus objetos, los agentes decomisaron varios ordenadores, teléfonos móviles, relojes, carteras y tarjeteros, entre otros objetos, que podían estar relacionados con robos previos.
El dispositivo final para cogerlo se estableció después de varios seguimientos y vigilancias el pasado 31 de enero en los alrededores de su domicilio. En el momento de la detención, el joven llevaba diferentes objetos que presuntamente corresponderían a robos previos. Los agentes registraron el piso y encontraron todo lo que hurtó, que en gran medida ya ha sido devuelto a los legítimos propietarios. El ladrón pasó este 3 de febrero a disposición judicial y el magistrado decretó su puesta en libertad.