El asesino de Alla B., el hombre con quién se había casado hacía tres años y con quién había convivido en Porqueres (Girona) los últimos seis años de su vida, hasta este lunes, cuando ha sido asesinada, ya había tenido problemas con la justicia.
El asesino de Porqueres tiene antecedentes por robos y drogas
Los antecedentes del hombre, Miguel Ángel, de 45 años y de nacionalidad española, ponen de relieve el perfil del asesino. Si bien no constan antecedentes penales por delitos de violencia de género, sí que tiene por robos y por drogas. Incluso, aseguran fuentes policiales, había llegado a ingresar en la prisión.
Después de asesinar a la mujer a media tarde el hombre salió de casa y no fue hasta en torno a las diez de la noche que se entregó en la comisaría de los Mossos d'Esquadra de Banyoles. Fue allí mismo donde quedó detenido. Los policías fueron a la dirección que había facilitado el hombre y confirmaron el cuerpo sin vida de Alla B., de 48 años y de nacionalidad letona.
Según han explicado fuentes policiales a ElCaso.com, el hombre cuando entró en la comisaría explicó que iba bajo los efectos de la droga. También aseguró a la policía que cuando salió de casa la mujer todavía estaba viva y que no sabía si la había matado o no.
Se pelearon para no tener trabajo y consumir drogas
Fue al mediodía que la pareja empezó a discutir porque ella le reprochó que no tuviera trabajo y que estuviera enganchado a las drogas, según ha explicado él mismo y recoge ACN.
Según su relato, durante la disputa fue a la cocina, cogió un cuchillo de un cajón y, una vez en el comedor, le asestó una primera cuchillada por la espalda. La mujer se desplomó en el sofá y fue entonces cuando la apuñaló repetidamente en la barriga y en el cuello. Cuando los agentes entraron en el piso, en la calle del Canigó, confirmaron que la mujer estaba muerta y que tenía heridas de arma blanca en estas zonas del cuerpo.
Se marchó del piso y se entregó a los Mossos
Después de perpetrar el ataque, se marchó del domicilio y estuvo paseando durante horas hasta que finalmente fue a los Mossos de Banyoles hacia las diez de la noche donde explicó que había apuñalado a la mujer, pero que no sabía si la había asesinado. Ha pasado la noche en la comisaría de Banyoles y hoy por la mañana se ha mostrado colaborador con los investigadores para ayudar a aclarar qué pasó.