La Guardia Municipal de Sant Hilari Sacalm, en la Selva, y los Mossos d'Esquadra han detenido este domingo a primera hora de la mañana a un hombre que estaba amenazando a su pareja en su casa con un arma blanca. Los hechos han tenido lugar este domingo 30 de noviembre, alrededor de las siete de la mañana, cuando han recibido una alerta sobre una posible pelea que ha acabado con la detención de un hombre de 62 años, acusado de violencia machista, atentado contra agentes de la autoridad y amenazas. Según ha podido saber ElCaso.com, el hombre era de nacionalidad española.
Todo ha arrancado cuando los guardias municipales han recibido el aviso de una posible pelea en la avenida Jaume I de Sant Hilari, alertados por los vecinos, que aseguraban haber oído ruidos preocupantes. Los policías se han desplazado al lugar de los hechos junto con el Sistema d'Emergències Mèdiques (SEM). Han localizado la casa donde había los problemas y, dejando a los sanitarios fuera, los policías han entrado. Dentro, se han encontrado con un escenario de lo más macabro, con sangre por el suelo, y les ha recibido un hombre herido, con un cuchillo en la mano, que inmediatamente les ha querido echar de su casa.
Dice haber matado a su mujer
Los guardias han hablado con él, intentando que les explicara qué había pasado, que dejara el arma y que se calmara. El hombre, que se había autolesionado con el cuchillo, llenando la casa de sangre, les ha dicho que había apuñalado a su mujer y que estaba en la planta de arriba, muerta. Antes de poder comprobarlo, los agentes han continuado hablando con el supuesto homicida, y finalmente han conseguido que dejara el arma en el fregadero de la cocina. Es cuando los agentes han podido reducir al hombre e intentar detenerlo. Cuando le estaban poniendo las esposas, el hombre les ha atacado y, con una de las manos que aún tenía libres, ha dado un puñetazo a uno de los agentes municipales.
Con la ayuda de su compañero, los guardias han podido finalmente reducir al hombre y ponerle las esposas. En este momento, la mujer, que se suponía que estaba muerta, ha bajado corriendo desde la planta superior y ha escapado por la puerta, saliendo fuera, donde se encontraba el personal sanitario. El SEM se ha hecho cargo de la mujer, que, contra todo pronóstico, no presentaba ninguna lesión, pero sí que estaba claramente afectada por la situación. Los dos agentes han sacado al agresor de la vivienda y lo han dejado en manos de los Mossos, encargados de la detención y de la entrega del hombre al juzgado por los tres delitos: violencia machista, atentado contra agentes de la autoridad y amenazas. El agente de la Guardia Municipal ha sido trasladado, aunque fuera de peligro, al hospital de Vic.
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