Un falso secuestro y la incautación por parte de agentes de la Guardia Urbana de Badalona de una mochila con 300.000 euros el año 2021, en un control que se estaba haciendo para evitar el tránsito de personas durante las restricciones fruto de la Covid-19, activó una investigación que los Mossos d'Esquadra y la Guardia di Finanza italiana, con la colaboración de la Interpol, han explotado este mes de octubre con la detención de veinte personas en Catalunya y casi una sesentena en Italia.
Las investigaciones policiales han permitido desmontar dos organizaciones criminales que habían encontrado en Catalunya el terreno perfecto para realizar su ilícito negocio. Unos dedicados al tráfico de marihuana y hachís, desde Marruecos a Italia, pasando por Catalunya. Y los otros para blanquear dinero y haber creado un sistema de pagos en efectivo que permitía, sin ningún control fiscal ni tributario, mover dinero de ida y vuelta entre Barcelona y Milán.
La colaboración internacional de los Mossos d'Esquadra de las Áreas Centrales de Crimen Organizado y de Delitos Económicos pudieron estirar el hilo a raíz de la intervención de los 300.000 euros de Badalona. El hombre identificado con el dinero, aunque la causa fue archivada por falta de indicios de criminalidad, saltó que formaba parte de un grupo de personas que la policía italiana estaba siguiendo en el marco de una investigación contra el tráfico de drogas. Desde entonces, que de manera conjunta se ha trabajado en una investigación binacional entre Catalunya y el sur de Italia, donde estaba instalada la mafia, bajo la coordinación de la Europol. En una primera fase se pudo situar en Barcelona parte de la cúpula de la red que la Guardia di Finanza estaba investigando.
Cas Magenta: Italia, Marruecos y China unidos por el crimen organizado
Este entramado se encargaba de comprar hachís y marihuana en Catalunya en un segundo grupo criminal, originario de Marruecos, que organizaba entradas de hachís desde el sur de la península y compraba marihuana en Catalunya, el jardín de Europa, que ponía a disposición de la mafia italiana. La droga se guardaba en almacenes en Catalunya después de entrar desde el mar y la mayoría salía en grandes camiones hacia Italia. La organización también la comercializaba por su cuenta en Catalunya. En estos vehículos también se cargaba la marihuana que compraban a productores locales.
La conexión Badalona permitió saber también cómo movían el dinero los integrantes de la parte italiana del entramado. La pista fue saber de donde salía el hombre que fue intervenido por la policía de Badalona. Salía de un establecimiento regentado por personas de nacionalidad china en el 'Chinatown' catalán, el polígono de Granland, en Badalona. No estaba allí por azar. El dinero que llevaba en la mochila, sospechan los Mossos d'Esquadra, lo acababa de retirar del establecimiento después de recibir la transferencia desde Italia.
Los Mossos confirmaron que varios establecimientos de esta zona de Badalona, donde se concentran varios almacenes y restaurantes chinos que servían de oficinas para mover dinero entre Italia y Catalunya con el método conocido como 'fei chien' —en el mundo árabe se conoce como 'hawalla'— que basado en una relación de confianza entre dos nodos alejados, en este caso, los dos con personas chinas en el extremo, facilitan la movilidad de dinero sin enviar físicamente el dinero, y evitando así el control financiero y tributario. Se entrega el dinero en un punto y se recoge en otro, después de facilitar un código. El dinero que se mueve con este sistema acostumbra a acabar en el crimen organizado y las 'oficinas' se quedan entre un 5 y un 10% del capital transferido, para el servicio.
Veinte detenidos en Catalunya, nueve por el 'fei chien'
El pasado 17 de octubre los Mossos, de manera coordinada con Guardia di Finanza, explotaron lo que se ha bautizado como el caso Magenta y se detuvieron veinte personas en Catalunya y casi una sesentena en Italia. Entre estos detenidos hay de las tres ramas —nueve fueron arrestados en Badalona, en naves y restaurantes chinos, donde se confiscaron casi 720.000 euros en efectivo, que la policía sospecha que forman parte de este método conocido como 'fei chien'.
En total se hicieron 105 entradas, entre las que se realizaron en Barcelona y área metropolitana y en Milán. En Italia, la Guardia di Finanza intervino varios vehículos de alta gama y confiscó propiedades por valor de 129 millones de euros. Con respecto a la rama marroquí, que controlaba el tráfico de drogas, los Mossos han intervenido en varias fases de la investigación un total de 1.200 kilos de hachís y 44 kilos de marihuana, valorado en unos tres millones de euros. En Italia el número de droga intervenida, la que llegaba de Marruecos después de hacer escala en Catalunya, supera los 30.000 kilos.
Esta operación, aseguran el inspector Antoni Salleras, jefe de la Área Central de Crimen Organizado de la División de Investigación Criminal, y el subinspector José Merino, jefe del Área Central de Delitos Económicos de la División de Investigación Criminal, es la de más alcance y más repercusión que ha hecho nunca el cuerpo de los Mossos d'Esquadra contra el narcotráfico a escala internacional.