Las personas mayores son uno de los grandes objetivos de los ladrones por su gran vulnerabilidad, sobre todo si viven o se encuentran solas. En este sentido, uno de los métodos más utilizado para entrar en sus casas y poder robarles joyas y dinero es el de los falsos revisores. En Barcelona, hace pocos días se ha vivido uno de estos casos, según ha podido saber ElCaso.com, que ha tenido acceso a la denuncia hecha por las víctimas. Los hechos tuvieron lugar alrededor de las once y media de la mañana del pasado 9 de julio, cuando dos hombres se presentaron en casa de una pareja de ancianos de unos 80 años, y picaron al timbre diciendo que eran operarios del gas y que había habido un error en la última factura y tenían que revisar el contador.
La mujer del matrimonio, que en aquellos momentos estaba sola en casa, les abrió la puerta y los dejó entrar sin sospechar que podrían ser unos ladrones. Uno de los hombres fue hacia la cocina y empezó a manipular el contador sin guantes mientras la abuela estaba a su lado. El otro hombre, sin embargo, se fue y empezó a moverse por el resto de la casa sin decir que estaba haciendo. Llegado el momento, uno de los hombres le pidió el número PIN de la tarjeta para, supuestamente, pagar la factura, pero la mujer se negó. Finalmente, al cabo de diez minutos, se marcharon después de decirle que la caldera no funcionaba correctamente y que tenía que contactar con el técnico para que la arreglara.
Le habían robado las joyas y el dinero
Un rato más tarde, cuando su marido llegó a casa, la mujer le explicó que habían venido dos técnicos del gas. Fue entonces cuando se dieron cuenta de que las tarjetas y las cartillas del banco que tenían en el mueble del recibidor habían desaparecido. Además, también se encontraron la habitación de matrimonio completamente revuelta y algunos objetos tampoco estaban en su sitio. La mujer, al darse cuenta de que la habían engañado y no se trataba de unos revisores del gas sino de unos ladrones que habían entrado a su casa y la habían saqueado, sufrió una crisis de ansiedad y tuvo que ser ingresada en urgencias.
Posteriormente, presentaron la denuncia a los Mossos d'Esquadra y explicaron que les habían robado un reloj de oro, otro reloj de plata de la marca Festina, una tarjeta de crédito y dos libretas bancarias. Según el testimonio de la víctima, los dos ladrones serías personas de nacionalidad española de entre 35 y 40 años que iban con mascarilla y no llevaban guantes. La Unidad de Investigación de la comisaría de los Mossos del distrito de Horta-Guinardó se ha hecho cargo del caso y está buscando a los falsos revisores del gas. Hoy por hoy, sin embargo, todavía no hay detenidos y los ladrones podrían estar buscando nuevas víctimas.