Este domingo al mediodía, los Mossos d'Esquadra han protagonizado una intervención peligrosa en el centro de Barcelona. La alerta la dio un agente fuera de servicio de la policía catalana, quien avisó a varias patrullas en la calle de Sardenya, en el Eixample, después de ver cómo un hombre de 25 años, de nacionalidad española, salía de un establecimiento de restauración con un cuchillo y entraba en una tienda con la intención de robar.

El hombre había accedido primero al restaurante pidiendo dinero y, al recibir una negativa por parte de los responsables del establecimiento, sacó el arma blanca y los amenazó. Sin embargo, no consiguió ni un euro y salió. A continuación, entró en una tienda de tipo 24 horas situada al lado, donde repitió la misma operación, pero con el mismo resultado: salió con las manos vacías, pero con un cuchillo de grandes dimensiones en una mano.

Reducido por Brimo y USC de los Mossos

El aviso del agente fuera de servicio activó la emisora, y varias patrullas de la Unidad de Seguridad Ciudadana (USC) de la comisaría del Eixample, así como un equipo de la Brigada Móvil (Brimo) que se encontraba por el centro de Barcelona, se movilizaron. En diez minutos desde el aviso, los agentes pudieron rodear al hombre —el agente fuera de servicio lo siguió para no perderlo—, y aunque se mostró hostil con la policía, finalmente, al ver que estaba acorralado, tiró el cuchillo al suelo. En ese momento, agentes de la Brimo y de la USC lo redujeron y detuvieron.

Según ha podido saber ElCaso.com, se trata de un hombre de 25 años, vecino de Sant Adrià de Besòs, con siete antecedentes, y fue arrestado por dos delitos de tentativa de robo con violencia y por un supuesto delito de amenazas por haber amenazado a los agentes que lo rodearon antes de poder arrestarlo. Después de ser cacheado, fue trasladado a la comisaría de Les Corts a la espera de ser entregado este lunes al juzgado de guardia. Según han confirmado fuentes de la policía catalana, ningún agente, víctima ni el propio arrestado resultaron heridos.