La Policía Nacional investiga una agresión sexual a una niña de 13 años el día de Año Nuevo en plena calle en el distrito de San Blas de Madrid, cerca de la autovía M-40.
Macabro hallazgo de Año Nuevo
Así lo ha explicado el cuerpo policial en un comunicado, en el que han detallado que los hechos tuvieron lugar el sábado, día 1 de enero, poco después de las ocho y media de la tarde.
Un hombre que paseaba a su perro por el barrio de Las Musas, vio la macabra escena: una menor estaba rodeada de dos chicos que tenían los pantalones bajados.
Agresión sexual a una niña de 13 años
Automáticamente, dio la voz de alarma y hasta el lugar de los hechos se trasladaron agentes de la Policía Municipal, que consiguieron retener a uno de los chicos. Fue entonces cuando la víctima aseguró que al menos uno de ellos la había violado.
Sanitarios del Samur y Policía Municipal de Madrid / Archivo
También acudieron sanitarios del Samur y de Protección Civil, que valoraron trasladar a la niña al Hospital de la Paz de Madrid para una mejor evaluación.
Paralelamente, los agentes iniciaron el protocolo en casos de agresión sexual, identificando a los presuntos culpables, que también tienen 13 años, y poniendo los hechos en conocimiento de la Fiscalía de Menores, que decidirá sobre el futuro de los chicos, que por su edad son inimputables a nivel penal.
Muere una mujer a causa de una cirugía estética
El año también empezaba con una tragedia en Murcia, donde una mujer de 39 años, Sara, moría el día 2 en la UCI del Hospital Virgen de la Caridad de Cartagena tras las complicaciones de una cirugía estética.
La víctima, madre de dos hijos, ya se había sometido anteriormente a otras operaciones para modificar el aspecto de su cuerpo, por lo que varios médicos le desaconsejaron que se hiciese la lipoescultura que ella quería.
Finalmente, encontró a un profesional que lo hiciese, aunque cada vez se duda más sobre la profesionalidad de este sanitario.
Acusan al cirujano de homicidio imprudente
Y es que el cirujano le cobró menos de 6.000 euros en lugar de los 13.000 de media que suelen costar estas intervenciones.
Además, testigos de la operación aseguran ahora, según el abogado de la familia, que no todos los presentes en el quirófano eran profesionales y que el médico podría haberse encontrado bajo el efecto de alguna droga durante la intervención.
Sara, la víctima / RRSS
Aparte de estos factores, la Fiscalía buscará más indicios que permitan acusar al cirujano de homicidio, tal y como pide la familia, que también asegura que "succionó vísceras" en lugar de la grasa abdominal que pretende reducirse con esta operación.