La familia de la víctima de la brutal agresión en Igualada, una menor de 16 años que sigue recuperándose de las lesiones cinco meses después del ataque, ha reaccionado a la detención de su agresor, que ha tenido lugar a las cinco y media de esta madrugada en casa del ahora detenido, en el centro de la ciudad. Según ha declarado el abogado de su familia, el arresto hace que ahora la joven pueda estar "más tranquila".
La familia de la víctima de la agresión de Igualada reacciona a la detención
El letrado, Jorge Albertini, ha detallado que la detención del autor de los hechos, que ha causado graves y permanentes secuelas en la chica, ha sido acogida con "felicidad y alegría" en el entorno de la víctima, y asegura que así podrá empezar a retomar una vida más tranquila. Y es que, según Albertini, la familia ha vivido sumida en un "temor constante y permanente" por el "trauma" que tiene la menor tras sufrir esta brutal agresión, que sigue sufriendo por las lesiones.
De hecho, la agresión sexual fue tan brutal que cuando fue encontrada el pasado 1 de noviembre por un camionero en el polígono industrial Les Comes, donde había estado de fiesta en la discoteca Epic para celebrar Halloween, pensó que estaba muerta. Rodeada de sangre, presentaba un grave traumatismo craneoencefálico y varios desgarros internos en los genitales debido a la violencia de la violación. Cinco meses después, aún no se ha podido recuperar y ya acumula más de cinco intervenciones quirúrgicas, además de seguir en tratamiento médico.
La menor sigue sufriendo las secuelas del ataque
Hace pocos días tuvo que ser ingresada de nuevo en el Hospital Sant Joan de Déu de Barcelona por las secuelas de las lesiones que sufrió durante la agresión sexual, aunque "poco a poco se va recuperando", ha relatado el abogado. En ese mismo hospital estuvo casi dos meses ingresada después de la noche de los hechos en la que salvó la vida por muy poco. Las secuelas psicológicas serán aún más difíciles de superar, aunque la detención del joven esta madrugada supone un alivio. Poco después, ElCaso.com ha podido hablar con los vecinos del joven.
El detenido, según ha podido saber ElCaso.com, tiene unos 20 años, y la periodista Anna Punsí asegura que es de nacionalidad boliviana. La violencia de la agresión deja abierta aún la posibilidad de que el arrestado no actuase solo, aunque de momento es el único acusado de los Mossos d'Esquadra. Su detención forma parte de una difícil investigación llevada a cabo por la Unidad de Agresiones Sexuales (UCAS) de la División de Investigación Criminal, con Esther Salcedo al mando, que se encuentra en el domicilio del joven para el registro de la vivienda.
Una investigación muy complicada y bajo secreto de sumario
Junto a ella se encuentra también el inspector jefe de la División de Investigación Criminal (DIC), Joan Carles de la Granja, así como el intendente jefe de la Comisaría General de Investigación Criminal (CGIC), Ramon Chacon. Parte de la dificultad durante las pesquisas se debía a la falta de imágenes o cámaras de seguridad en la zona en la que apareció la víctima, así como su propio testimonio, que fue imposibilitado por las brutales lesiones de la agresión, que la indujeron en un estado amnésico.
Pese a la tardanza, Albertini recalca que "en todo momento hemos confiado" en el trabajo de los Mossos d'Esquadra: "Siempre hemos dicho que teníamos que esperar, era lo lógico en una investigación de esta naturaleza y con estas circunstancias". Sin embargo, no ha dado más detalles de los hallazgos policiales, ya que el caso sigue bajo secreto de sumario, y ha declarado que a nivel judicial todo acaba de empezar, aunque señala que en cuanto sea posible, la familia se personará en la causa.