Agentes de la Policía Nacional de Ibiza han detenido a un empresario español de 72 años de edad, acusado de dos presuntos delitos de abuso y acoso sexual a una de sus trabajadoras. La empleada, una joven de 17 años y, por lo tanto, menor de edad, denunció los hechos el pasado martes 26 de julio, alegando que durante el desempeño de su jornada laboral se sentía muy incómoda por la actitud de su superior, quien hacía comentarios sobre su físico y su forma de vestir, llegando incluso a tocar el glúteo de la menor. Tras una breve investigación, los agentes de la Unidad de Atención a la Familia y Mujer (UFAM) detuvieron al hombre el pasado miércoles

El acusado ha pasado a disposición judicial del Juzgado de Instrucción en funciones de guardia a lo largo del día de hoy, jueves 28 de julio. No obstante, el magistrado finalmente ha decretado la libertad para el acusado, sin que haya trascendido si se trata de libertad con cargos, ni si la investigación continuará adelante. 

La joven denunció a su superior por la actitud obscena e inapropiada que tenía con ella 

La menor, de 17 años, trabajaba para la empresa del acusado, un hombre de 72 años, si bien no ha trascendido cuánto tiempo llevaba la chica trabajando ahí, ni si el comportamiento obsceno e inapropiado denunciado por la joven era reciente o hacía meses que se perpetraba. En todo caso, la muchacha se presentó en las dependencias policiales de la ciudad de Ibiza para denunciar que, durante su jornada laboral, su superior la incomodaba con comentarios obscenos sobre su físico y su forma de vestir. En una ocasión, el individuo, presuntamente, llegó a dar tres palmadas en el glúteo de la víctima. 

La UFAM investigó al empresario, que acabó detenido

Tras interponer la joven trabajadora la denuncia contra su superior por los presuntos delitos de abuso y acoso sexual a una menor, la Unidad de Atención a la Familia y Mujer (UFAM) realizó una breve investigación, que culminó al día siguiente, el pasado miércoles 27 de julio, con la detención del individuo como presunto autor de los delitos descritos. El hombre ya ha quedado en libertad, y por ahora se desconoce qué dirección seguirá la investigación, ni si la denunciante mantendrá la acusación. En el caso de avanzar, el acusado podría enfrentarse a una pena máxima de prisión de cinco a siete meses, o bien a una multa de diez a catorce meses, al haber cometido, presuntamente, el delito de acoso sexual aprovechándose de su situación de superioridad laboral, puesto que el hombre era el jefe de la menor. 

¿Qué hacer si se sufre de acoso sexual en el trabajo?

En el caso de que una mujer, tenga la edad que tenga, sufra una situación de acoso y abuso sexual en el ámbito laboral, es necesario que, en la medida de lo posible, lo comunique a las personas correspondientes dentro de la misma empresa (la persona encargada de igualdad, a Recursos Humanos, etcétera); todas las empresas están obligadas a tener un protocolo que ampare a las víctimas en el caso de que se dé una situación de este tipo. Este tipo de delitos están expresamente prohibidos por la Ley Orgánica 3/2007, de 22 de marzo. Si se es víctima de un delito de acoso sexual o por razón de sexo en el ámbito laboral, el Ministerio de Igualdad insta a las afectadas a contactar al teléfono 900191010, o al correo inmujer@inmujeres.es, el servicio de información y asesoramiento del Instituto de las Mujeres. A la vez, también es recomendable presentar una denuncia en comisaría o juzgado de guardia, una demanda en el juzgado de lo social, otra ante Inspección de Trabajo y Seguridad Social, tramitar una queja a través de los canales de la misma empresa y, finalmente, recopilar todas las pruebas posibles.