Mientras todos estamos pendientes de robar el regalo de última hora, hay un ejército de ciberdelincuentes que no para de trabajar. La policía ha informado que, durante las fiestas de Navidad, las estafas digitales aumentan exponencialmente. Además, debido a las nuevas tecnologías, las trampas son cada vez más sofisticadas y diseñadas para hacer caer a la víctima y vaciar la cuenta corriente en un abrir y cerrar de ojos. Uno de los clásicos que nunca falla es el del "paquete retenido", que seguro que ya ha llegado a buena parte de los catalanes. De repente, aparece un mensaje en nuestro móvil, ya sea vía SMS o WhatsApp, que dice que tenemos un paquete pendiente de entrega donde faltan dinero de las tasas o que la dirección es incorrecta. Antes de clicar, sin embargo, debemos detenernos y no acceder a ningún enlace. Este método, conocido como smishing, el ciberdelincuente aprovecha que todo el mundo espera paquetes para hacer creer que hay problemas y crear un enlace donde se dirige a una página web idéntica. Los ladrones esperan que pongas los datos de tu tarjeta y así tener acceso a los datos bancarios. Todo esto, sin embargo, es falso, y las empresas de transporte ya han comunicado, en diversas ocasiones, que nunca pedirán datos personales o pagos extra a través de un mensaje de texto.
Regalos y viajes que salen demasiado caros
En internet, si una cosa parece demasiado buena para ser verdad, la mayoría de las ocasiones, es mentira. La policía ha detectado una lluvia de tiendas en línea falsas que ofrecen los productos estrella de la temporada, como consolas, perfumes de lujo o ropa de marca, con descuentos de hasta el 90%. Poder tener lo que más queremos a un precio muy reducido es una buena excusa para hacer clic en el enlace, pero el resultado siempre es el mismo: el producto nunca llega y los datos bancarios quedan en manos de los ciberdelincuentes. Un consejo que siempre dan los expertos en ciberseguridad es buscar el candado en la barra de la dirección, pero sobre todo, desconfiar de webs que solo aceptan transferencias o métodos de pago poco habituales.
Otra vía que tienen los ciberdelincuentes para atrapar a sus víctimas son los viajes. Con las vacaciones, muchas personas aprovechan para hacer turismo, y los ciberdelincuentes ven una buena ocasión para realizar estafas relacionadas con los alquileres. Los anuncios con fotografías espectaculares a precios de risa en portales que parecen oficiales, pero que te obligan a hacer el pago fuera de la plataforma, han crecido exponencialmente. Una vez reservas y pagas, sin embargo, el "propietario" desaparece y no vuelve a coger el teléfono.
La policía insiste en tres reglas de oro: paciencia, verificación y sentido común. Lo más importante es no tener prisa por comprar, revisar las opiniones de otros usuarios y utilizar siempre métodos de pago seguros o tarjetas monedero virtuales para las compras en línea.
