Tres detenidos en Salou (Tarragona) por utilizar tarjetas bancarias de otras personas y convertir el dinero en criptomonedas. Los Mossos d'Esquadra arrestaron a tres jóvenes, dos de 19 años y uno de 21, el miércoles, 26 de marzo, de la semana pasada, como supuestos autores de los delitos de pertenencia a grupo criminal y estafas bancarias. Eran una especie de muleros, pertenecientes, al parecer, a una banda mayor y que se encargaban de blanquear los importes que sustraían de los cajeros de cuentas de terceras personas mediante criptomonedas, como por ejemplo bitcoins.

Un hombre encapuchado, miles de euros y facturas de criptomonedas en Salou

El arresto el pasado miércoles tuvo lugar en Salou, cuando una patrulla observó que en un cajero automático había un hombre vestido con una capucha. Estaba operando, con actitud de alerta, según ha explicado la policía. Los agentes hicieron un seguimiento discreto y vieron que subía a un vehículo en marcha con otros dos ocupantes. Los Mossos d'Esquadra, finalmente, les dieron el alto e identificaron a los tres individuos, los cuales no explicaron cómo habían hecho la operación ni con qué medio. Esta actitud sospechosa acabó en un registro, en el que les encontraron 1.135 euros, 1.245 euros y 450 euros, respectivamente.

Aun así, los tres jóvenes no dieron ninguna explicación sobre la procedencia legítima del dinero ni información bancaria. El registro continuó en el vehículo y encontraron diecisiete cupones de criptomonedas con valores de entre 25 y 500 euros, cuatro facturas de compra de criptomonedas por valor de 2.500 euros a nombre de uno de los individuos, pero con una tarjeta bancaria de otra persona; diez tickets intercambiables por criptomonedas por valor total de 2.500 euros comprados con la tarjeta de otra persona; unos auriculares valorados en 579 euros comprados por uno de los tres chicos que no pudo explicar cómo había adquirido, y una tarjeta bancaria a nombre de un tercero.

Así hacían de "muleros bancarios"

Los Mossos d'Esquadra intervinieron, además, siete teléfonos móviles con los cuales habrían hecho las supuestas operaciones de blanqueo con criptomonedas y los arrestaron a los tres. Los detenidos hacían de mulero bancario con el añadido de convertir el dinero de procedencia ilícita en monedas digitales y así hacer más opaco el blanqueo. La policía catalana, al ser preguntada por este medio, no ha facilitado más datos de los arrestados. Los jóvenes, acusados de estafas bancarias y por pertenencia a grupo criminal, pasaron el sábado pasado a disposición del Juzgado de Instrucción en funciones de guardia de Tarragona.