Como ya es costumbre, la gran mayoría de estafadores consigue engañar a sus víctimas haciéndose pasar por otras personas o empresas. Generalmente, lo que hacen es fingir que trabajan en un banco o alguna gran empresa, como es el caso de Microsoft, pero en otras ocasiones se hacen pasar por personas conocidas, como pueden ser famosos, presidentes o, en este caso, jugadoras de golf, una estrategia que puede parecer absurda, pero que ha permitido a los estafadores conseguir miles de euros haciendo creer a muchos hombres que tendrían citas y encuentros secretos con ellas si pagaban por este tratamiento VIP.
Nombres como Paige Spiranac, Nelly Korda o Rose Zhang quizás se nos hacen extraños si no tenemos demasiados conocimientos del tema, pero todos estos nombres son de estrellas de golf femenino, mujeres jóvenes que, por culpa de su fama, se han convertido en víctimas de suplantación de identidad. Los estafadores se hacen pasar por ellas y aprovechan sus imágenes para crear falsos perfiles y poder engañar a sus fans, ofreciéndolos encuentros privados o reuniones secretas, algunos de los cuales están dispuestos a pagar auténticas fortunas para tener la oportunidad de quedar con ellas. Uno de los casos más exagerados es el de un hombre de 60 años que llegó a pagar 64.000 euros al ladrón para concertar un encuentro con Rose Zhang, una chica de 22 años ganadora de varios campeonatos de golf en los Estados Unidos. El estafado llegó a reservar una habitación de hotel donde se supone que se iba a encontrar con la jugadora profesional, pero cuando llegó vio que se trataba de un engaño y que ya no podía recuperar el dinero.
Víctimas múltiples
Las víctimas de esta situación, sin embargo, no son solo los hombres que pierden sus ahorros, sino que también afecta a las mujeres a las cuales suplantan la identidad, que después acaban pagando los platos rotos y tienen que aguantar las críticas, reproches y, a veces, agresiones de estas víctimas que las acusan de mentirosas, de infieles y de estafadoras cuándo ellas ni siquiera saben de qué va el asunto.