Una nueva pesadilla para los conductores imprudentes ha llegado a las carreteras. Ahora, un modelo de radar permite detectar a aquellas personas que, mientras conducen, utilizan el móvil.
La revolución tecnológica y la inteligencia artificial han conseguido que una nueva versión de estos aparatos, que tanto miedo dan a los conductores, pueda pillar todos aquellos que infrinjan la ley, más allá de la velocidad a la que van.
Alta resolución
A partir de ahora, las multas ya no llegarán solo a los conductores que se pasen apretando el acelerador. La cámara de estos nuevos radares será capaz de captar, con una gran definición, a todos aquellos infractores que utilicen el móvil en el volante.
Los aparatos harán todas las fotos que puedan a cada coche que pase, y un sistema de inteligencia artificial permitirá que se analicen en el instante y se determine, en aquel mismo momento, si lo que están haciendo es motivo de multa o no.
Aparte de hacer unas fotografías mucho mejores y más precisas que las de los radares convencionales, uno de los pros de estos innovadores artefactos es que, si se determina que no hay infracción, las fotografías se eliminarán de la base de datos en una hora.
Una prueba error
Estos nuevos dispositivos, que prometen revolucionar el mundo de la conducción, se han instalado por primera vez en Nueva Gales del Sud, en Australia.
Ahora las autoridades tendrán que comprobar su efectividad, así como el éxito que demuestren. Si los resultados son positivos y satisfactorios, es posible que otros países utilicen este mismo método e incorporen estos radares a sus carreteras.
El objetivo es reducir el número de accidentes provocados por distracciones en el volante, a menudo causadas por la utilización de dispositivos digitales mientras se conduce.