Este 11 de septiembre, dos ladrones, de los habituales en el aeropuerto de Barcelona, asaltaron a un turista chino, le robaron la maleta sin que se diera cuenta y escaparon con un botín de 27.000 euros. Aunque los agentes los tenían plenamente identificados, no los pudieron detener aquel día y desde entonces que estos dos veteranos ladrones -los dos tienen varios antecedentes y se les ve a menudo rondando por las terminales del Josep Tarradellas- estaban en busca y captura. Los Mossos d'Esquadra pensaban que, al haberse embolsado una cantidad tan grande, tardarían un tiempo en volver. Se equivocaban, sin embargo, y según ha podido saber ElCaso.com, este sábado por la mañana los han podido pillar con las manos en la masa.
Y es que han vuelto a las andadas, acechando turistas con suficiente poder adquisitivo para garantizar una copiosa "recompensa". Hoy, han cometido el error de volver a su lugar habitual de delincuencia demasiado pronto; solo han pasado cuatro días desde que desaparecieron con una maleta que escondía miles de euros, y todos los cuerpos policiales y de seguridad del aeropuerto estaban en alerta.
Reconocidos por los vigilantes de seguridad y detenidos 'in fraganti'
Según han explicado fuentes policiales a ElCaso.com, habían difundido las fotos de los dos sospechosos, uno de nacionalidad argelina y el otro marroquí, entre los diferentes cuerpos que tienen competencias sobre la seguridad del aeropuerto. Gracias a eso, los vigilantes de seguridad los han reconocido cuando estaban intentando cometer otro hurto al descuido, aprovechando que el propietario de la maleta estaba distraído para coger el equipaje y marcharse de manera sigilosa, pero rápida, desapareciendo entre la multitud antes de que la víctima se diera cuenta de que le habían robado.
A diferencia de lo que pasó el miércoles, esta vez no han conseguido escapar. Han sido retenidos por seguridad hasta que han llegado los Mossos d'Esquadra que los han detenido. A pesar de haber conseguido pillar a los dos ladrones con éxito, solo están acusados de hurto, considerado un delito leve, por lo que, muy probablemente, dentro de unos días vuelvan a estar en la calle con un antecedente más en su lista y, también con seguridad, volverán al aeropuerto para aprovecharse del descuido de los turistas.