Tres días. Eso es lo que ha durado la fuga de Jonathan Ll. A., un hombre de 41 años, que el pasado lunes, tal como avanzó El Caso.com, se escapó de la prisión de Quatre Camins, en La Roca del Vallès (Barcelona), aprovechando una salida programada. El recluso debía participar, junto con dos educadoras más y otros internos, en una visita a Granollers. Sin embargo, nada más salir del centro penitenciario, explicó que no se encontraba bien, hizo una maniobra de distracción, se subió a una furgoneta que le estaba esperando y huyó a toda velocidad. Los Mossos d'Esquadra, tras recibir el aviso de la evasión, activaron un dispositivo para atraparlo inmediatamente, pero no tuvo éxito y el preso desapareció.
Acaba volviendo voluntariamente a prisión tres días después
Este jueves, 20 de noviembre, tres días después de que el hombre se escapara de Quatre Camins, ha decidido regresar voluntariamente al centro penitenciario y se ha entregado. Por ahora, sin embargo, se desconoce si tenía alguna motivación concreta para huir durante unas horas de la prisión o si algún conocido, al enterarse de que se había escapado, le ha convencido para que volviera a la cárcel y no empeorara la situación. Los Mossos d'Esquadra, junto con el Departamento de Justicia, están investigando cómo pudo organizar esta evasión de película desde dentro del centro y quién le ayudó, ya que el hecho de que un coche le estuviera esperando en el exterior indica que debía tener comunicación con el exterior.
En este sentido, fuentes penitenciarias han aceptado en ElCaso.cat que Quatre Camins es la prisión de Cataluña donde, a pesar de estar prohibidos, hay más incautaciones de teléfonos móviles que los delincuentes utilizan para seguir su actividad delictiva u organizar fugas como esta. Casos como los del Jonathan, sin embargo, no son habituales, según apuntan desde el Departamento de Justicia y Calidad Democrática de la Generalitat. En este sentido, remarcan que las salidas programadas son un recurso de acercamiento social previsto reglamentariamente y tienen una tasa de fracaso que no llega al 0,7%.
No era la primera vez que escapaba de la cárcel
Jonathan Ll. A., de nacionalidad española y de 41 años, cumplía condena desde 2004 por diversos delitos, la mayoría por hurtos, robos violentos y sustracciones de vehículos. Estaba previsto que saliera en libertad definitiva el 27 de julio de 2032. Hacía nueve años que no salía de la cárcel, desde que en 2016 disfrutó del último permiso penitenciario que se le concedió. En aquella ocasión, sin embargo, no regresó a la cárcel de Lledoners cuando le tocaba y también se escapó. Además, también tenía varias causas abiertas por no haberse presentado a juicio cuando los jueces lo dejaban en libertad, confiando en que asistiría a las vistas. Desde que volvió a entrar en la cárcel, ha ido acumulando expedientes disciplinarios por comportamientos violentos en el interior del centro. Ahora, con esta nueva fuga, su condena se verá incrementada.