El centro de Lleida fue escenario la madrugada de este viernes de un violento robo que acabó con la víctima con múltiples contusiones. Pasaban veinte minutos de la medianoche cuando una patrulla de los Mossos d'Esquadra que estaba haciendo tareas de seguridad ciudadana por el Centre Històric de Lleida se encontraron con un hombre que les alertó de que acababa de ser víctima de un asalto con violencia en la calle de Sant Andreu. La víctima explicó a los policías que dos hombres le habían atacado por sorpresa, le habían dado puñetazos y patadas y le habían robado el teléfono móvil, dinero en efectivo y el paquete de tabaco.

Con esta información, y una descripción física de los dos asaltantes, los agentes empezaron a investigar por la zona hasta que poco después, alrededor de las dos de la madrugada, localizaron a dos hombres en la calle Companyia que coincidía con los detalles que tenían de los ladrones. Así pues, se les detuvo, se les identificó y se les registró, descubriendo que todavía llevaban encima tanto el teléfono móvil como el paquete de tabaco que le habían robado poco antes a la víctima. Por este motivo, ambos hombres, de 23 y 29 años, ambos con antecedentes y de quienes los Mossos no han facilitado la nacionalidad, fueron detenidos como presuntos autores de un robo con violencia.

Un multireincidente asalta una tienda de Lleida al mismo tiempo

Paralelamente, también a primera hora de la madrugada, los Mossos detuvieron a otro ladrón después de que entrara a robar en un local en reformas en la calle Maials de Lleida, en el barrio de la Bordeta. Una patrulla de la policía catalana se desplazó hasta el local después de que saltara la alarma y descubrió que alguien había accedido al interior por un agujero en la pared. Cuando estaban inspeccionando la zona, se encontraron con que justo al lado del local había un hombre que, al verlos, empezó a correr. Los agentes pudieron alcanzarlo rápidamente y vieron que donde se encontraba había una caja de herramientas y dos bobinas de cable de cobre que había robado y tenía preparado para llevarse. Por este motivo, el hombre, un multireincidente de 38 años con más de 40 antecedentes y de quien no se ha facilitado la nacionalidad, quedó detenido por un robo con fuerza.