Más de diez jóvenes agreden a un grupo de personas a la salida de la discoteca Twenties de Barcelona. Ahora se busca a los autores de la paliza, que actuaron sin motivo aparente y de forma brutal.

Brutal paliza en la puerta de la discoteca Twenties de Barcelona

La madrugada de este domingo un grupo de tres chicos y dos chicas denunciaron un ataque en las puertas de la discoteca Twenties, que está en el número 208 de la calle Rosselló, en pleno centro de la ciudad, al lado de la avenida Diagonal.

La pelea ocurrió sobre las tres y media de la mañana, cuando las víctimas esperaban un Cabify para volver a casa después de salir de fiesta.

Fue un grupo de unas 15 personas el que se acercó y empezó a increpar a los jóvenes "sin ningún motivo".

Según ha explicado uno de los afectados a ElCaso.com, ya se les veía venir, iban sin camiseta, chillando, increpando a la gente...

Agresión múltiple "sin ningún motivo"

Todo empezó con un "¿qué miras?", a uno de los atacados. Los jóvenes solo dijeron que no querían problemas y se cambiaron de acera.

Pero no sirvió de nada, ya que los agresores también cruzaron y empezaron a pegar a tres de los chicos, que se defendieron como pudieron "teniendo en cuenta el volumen de gente que eran", cuenta Joel Bellido en su cuenta de Instagram, en la que ha denunciado los hechos.

 

Unos cinco o seis se echaron encima de Joel, pegándole puñetazos y pateándole la cara y el cuerpo sin tener en cuenta que ya estaba medio inconsciente y no tenía forma de defenderse. Su amigo Xavi recibió un botellazo en la cara y también fue brutalmente apaleado.

Inconsciente en el suelo de una patada

Otra de las víctimas, Eric, intentó separar a los agresores de sus amigos, pero lo lanzaron contra el suelo y le propinaron una patada que lo dejó inconsciente.

No es hasta que ven que el joven no responde que dejan de golpearlos y huyen.

Uno de los jóvenes intentó intervenir y cayó al suelo, donde le dieron una patada en la cara que lo dejó inconsciente / Cedida

Entonces, tal y como se ve en el vídeo, unas chicas van a auxiliar a los heridos, una de ellas, la pareja de Eric, el chico que queda inconsciente.

Según relata Joel Bellido a ElCaso.com, una patrulla de Mossos d'Esquadra se presentó en el lugar de los hechos, pero no les tomó declaración.

Una ambulancia también acudió y, después de una valoración superficial, se fue. A Bellido también le robaron el móvil y la cartera, que encontró vacía metros más allá del lugar de los hechos.

Fracturas de nariz, contusiones y magulladuras

Por sus propios medios, los heridos fueron al Hospital de Bellvitge, donde fueron sometidos a varias pruebas.

El resultado: fracturas de nariz, fisuras, contusiones en el cráneo y múltiples magulladuras.

Fue allí donde iniciaron la campaña de difusión para encontrar a los autores de los hechos, que no conocían y de los que no tenían ninguna referencia.

Además, a Eric, que es diabético, le arrancaron la bombona subcutánea de insulina que tenía insertada, provocando una herida.

Contusiones craneales, fracturas de nariz y magulladuras a causa de la paliza / Cedida

También denuncian la pasividad de la seguridad de la discoteca Twenties, que no intervino en ningún momento, aún viendo la gravedad de la paliza.

Pese a no ser responsabilidad del local al ser en la vía pública, el personal podría enfrentarse a una presunta omisión de socorro por no intervenir.

"Hemos tenido suerte, el final podría haber sido muy distinto"

Los jóvenes ya han interpuesto una denuncia en los Mossos d'Esquadra, que ahora se centrarán en localizar a los agresores, que no se sabe si estaban dentro de la discoteca o esperaban fuera para poder iniciar una pelea.

Piden difusión para encontrar a los agresores y que esto no le pase a más personas / Cedida

Sobre todo, el mensaje de las víctimas alerta de la necesidad de encontrar a los responsables para que esto no vuelva a ocurrirle a otras personas.

"Bastante bien hemos salido, pero otro grupo a lo mejor se puede quedar ahí. Hemos tenido mucha suerte, en otro caso el final podría haber sido muy distinto, no era una pelea normal", sentencia Joel, ya en casa y en plena recuperación de las heridas.