WhatsApp es una reina de las aplicaciones de mensajería instantánea, aunque cada vez tiene más funciones que le hacen ser más que una simple app para intercambiar mensajes en tiempo real. Gracias a sus numerosas actualizaciones se pueden hacer una cantidad considerable de cosas con ella como llamar, enviar archivos, compartir nuestra ubicación o incluso hacer una videollamada.
Se ha popularizado extremadamente en los países occidentales, encontrar a una persona que no tenga una cuenta de WhatsApp es algo poco común, incluso hay varias personas de la tercera edad que han sido capaces de superar la brecha digital y han aprendido a usarla adecuadamente.
Su sistema y mecánicas son realmente sencillas, por lo que es accesible para casi cualquier tipo de usuario y los controles son muy intuitivos. Incluso para las personas que no tengan una buena ortografía o les cueste escribir en un teclado de teléfono móvil, hay alternativas como las notas de voz o incluso los teclados predictivos y correctores.
Aumentan las estafas por WhatsApp
Los estafadores se aprovechan de la enorme popularidad de WhatsApp, que es usado por personas de diferentes rangos de edad y de poder adquisitivo. Es por eso que intentar fundamentar un timo a través este medio asegura que habrá muchas víctimas potenciales, también los que no están familiarizados con el entorno digital pueden ser más vulnerables.
WhatsApp / Pixabay
Aunque anteriormente las estafas se hacían a través de SMS o correo convencional, los timos mediante plataformas digitales como WhatsApp u otras redes sociales se han vuelto muy frecuentes y por eso es muy importante conocer los métodos de los delincuentes para que no nos engañen con facilidad.
Estas personas ahora han comenzado a suplantar la identidad de empresas multinacionales, tienen conocimientos informáticos y cada vez preparan estrategias más elaboradas para engañar a un mayor número de personas. Ya que, en ocasiones, si creemos que nos dirigimos a una empresa conocida, no tenemos miedo de que nos puedan estar estafando.
Los trucos para evitar estas estafas
El primer truco para evitar ser engañado es el de desconfiar y asegurarse de la identidad de la persona que está contactando con nosotros por WhatsApp. Además, no todas las empresas usan este medio para hablar con sus clientes y es conveniente asegurarse de que la entidad que, supuestamente, está contactando con nosotros utiliza esta aplicación habitualmente.
También debemos de comprobarlo por otros canales, llamando a las oficinas, enviando un correo electrónico o incluso acudiendo a las oficinas centrales en casos más extremos. Debemos de tener mucho cuidado cuando nos envían mensajes con faltas de ortografía, una entidad importante nunca permitiría este tipo de tratos con los clientes, así que siempre deberemos desconfiar en estos casos.
Si la persona que nos envía mensajes parece ansiosa o apresura para hacer alguna operación, deberíamos de estar alerta. El objetivo de los estafadores es el de conseguir dinero o datos rápidamente y desaparecer, por lo que cada minuto que pasa hace que podamos darnos cuenta de su engaño y denunciarlos.