Conmoción en la localidad de Benalúa, en Granada, por la muerte de una niña de 13 años por una posible intoxicación por inhalación de gas butano. Los hechos han tenido lugar esta madrugada en una casa cueva de este municipio mientras la menor estaba durmiendo. Hacia las siete y media de la mañana, cuando los padres la han ido a buscar a su habitación, la han encontrado inconsciente y ya no reaccionaba a los estímulos. Rápidamente, en lugar de alertar a los servicios de emergencias, han optado por trasladarla hasta el hospital de Guadix en su propio vehículo. No obstante, a pesar de los esfuerzos de los profesionales del centro hospitalario, la menor ya ha llegado sin vida y no ha sido posible reanimarla, confirmando su muerte.

Desde el Hospital de Guadix han alertado de los hechos a la Guardia Civil, que ha abierto una investigación con el fin de aclarar el suceso y determinar las causas de la muerte. La principal hipótesis con la cual trabajan los investigadores es que la menor habría perdido la vida intoxicada por un gas tóxico, presuntamente gas butano. El cadáver ha sido trasladado a Instituto de Medicina Legal a fin de que se le practique la autopsia que confirme esta teoría. No consta que ninguna otra persona haya resultado intoxicada por este supuesto escape de gas butano.

Los vecinos de Benalúa, de luto

Los hechos, teniendo en cuenta que la víctima tenía 13 años, a escasos días de hacer 14, ha provocado un gran dolor entre los vecinos de Benalúa, un pueblo de poco más de 3.000 habitantes al norte de Granada. El alcalde, Manuel Martínez, ha explicado que "todo el mundo está consternado" por la muerte de la menor, que pertenecía a una familia muy grande y conocida del municipio, "de las de toda la vida". El alcalde, que ha calificado de desoladora la manera en la cual ha muerto la niña, ha anunciado un pleno extraordinario del Ayuntamiento para decretar tres días de duelo en el municipio.