Un joven de 20 años ha perdido la vida después de que este sábado recibiera una cornada de un toro durante un encierro en el pueblo El Casar, en Guadalajara, que se celebraba con motivo de las fiestas patronales. El chico fue evacuado de urgencia al Hospital Universitario de Guadalajara desde donde, después de una operación de urgencia, lo trasladaron al Hospital de La Paz de Madrid. La cornada le perforó uno de los pulmones provocándole una grave herida que, desgraciadamente, no ha podido superar y ha acabado muriendo.
Desde el Ayuntamiento de El Casar han decretado tres días de duelo oficial en el municipio y "lamentan profundamente el desgraciado accidente acaecido durante las fiestas taurinas". Este joven es la segunda persona que pierde la vida este verano en el pueblo durante un encierro; a finales de agosto, cuando empezaron las fiestas, otro hombre sufrió la misma suerte después de una cornada en Mesones, una pedanía del mismo municipio.
Se desconocía la gravedad de las heridas de la víctima
El accidente mortal tuvo lugar pocos minutos antes de la una del mediodía, cuando uno de los toros del encierro enganchó por el pecho al joven que participaba de la actividad en la plaza de toros del municipio. Los servicios de emergencias acudieron inmediatamente a prestar una primera asistencia in situ, pero pronto vieron que la condición del chico era bastante grave y lo estabilizaron para poder evacuarlo al hospital. Todo pasó muy rápidamente, y el sábado solo había trascendido que había un herido por una cornada. Desde el Ayuntamiento se informó que el animal "le había tocado un poco el pulmón", una situación que más adelante se supo que era más grave.