El Juzgado de lo Penal número tres de Roma sentencia a los cuatro jóvenes que drogaron, violaron en grupo y asesinaron a Desirée Mariottini, de 16 años, en 2018. Dos de ellos han sido sentenciados a cadena perpetua y los otros dos se enfrentan a más de 20 años de cárcel.
Sentencia del caso Desirée Mariottini
Los hechos sobre los que se ha conocido este lunes la sentencia, tuvieron lugar en 2018. A mediados de octubre, el cuerpo de una menor, de 16 años, fue encontrado sin vida, abandonado en un catre y cubierto con una manta dentro de un edificio abandonado de la Via dei Lucani, en el distrito de San Lorenzo de Roma.
Días después, el 25 de octubre, se detuvo a cuatro hombres: Mamadou Gara, de 27 años, Brian Minthe, de 43, Alinno Chima, de 47; y Yusif Salia, cuya edad no trascendió. Los cuatro se encontraban en Italia de forma irregular, provenientes de Nigeria, Senegal y Gambia.
Según las primeras investigaciones, la menor, Desirée, había sido drogada el día 18 de octubre, había quedado inconsciente y la habían violado en grupo. Antes de morir, había estado viva y sin consciencia varias horas.
Drogaron, violaron y mataron a una menor en Roma
Se pudo saber después que los condenados habían dado una mezcla de drogas a la chica, que se encontraba en crisis de abstinencia, asegurándole que era metadona, pero que en realidad estaba compuesta por psicotrópicos que le hicieron perder la "capacidad de reacción" y acabó siendo mortal. Tras violarla abandonaron a la joven aún con vida, sin avisar a los servicios de emergencias.
Ahora, tras dos años, los jueces condenan a Mamadou Gara y Yusef Salia a cadena perpetua, mientras que Brian Minteh a 24 años y medio y Alinno Chima a 27 años. Los cargos por los que han sido sentenciados son asesinato voluntario, violencia sexual agravada y transferencia de drogas a menores de edad.
Bárbara Mariottini, madre de Desirée: "No obtuve justicia"
Entre las pruebas se pudo encontrar ADN de los implicados en el cuerpo de Desirée, en una botella de metadona y en una pajita que la joven usó para fumar crack.
La madre, Bárbara Mariottini, que ha acudido a la sentencia vestida con una camiseta blanca con la foto de su hija y acompañada de la familia y amigos de la joven víctima, no considera justa la decisión del tribunal. "Esperaba cuatro cadenas perpetuas, pero no estoy satisfecha con esta sentencia. No he obtenido justicia".