Los Mossos d'Esquadra detuvieron el sábado al mediodía a un joven de 24 años, de origen marroquí, acusado de haber violado y agredido físicamente a una chica de 21 después de retenerla en su furgoneta en un camino junto a la ermita de Grenyana, en L'Horta de Lleida. El secuestro y presunta agresión sexual tuvieron lugar el mismo sábado por la mañana, alrededor de las ocho y media, y el arrestado soltó a la víctima después de terminar con ella. Unos vecinos que justo pasaban por allí la vieron salir corriendo del vehículo, y se acercaron a ella al ver que estaba malherida y en un estado evidente de nerviosismo.
La chica les explicó lo que había pasado, y la acompañaron a la comisaría de los Mossos d'Esquadra para interponer la denuncia. Mientras tanto, el sospechoso se marchó con la furgoneta. Según ha adelantado el diario Segre, la joven explicó tanto a la policía como a las personas que la ayudaron que el chico la cogió y la hizo entrar en la furgoneta por la fuerza, quitándole el móvil para que no pudiera avisar a nadie. También dio la descripción del presunto violador a los agentes, que pusieron en marcha un dispositivo de búsqueda por la zona.
Pillado horas después
Mientras la policía peinaba todos los rincones de la partida de Grenyana, la víctima fue trasladada al hospital para evaluar su estado y atender sus heridas. Pocas horas más tarde, en torno al mediodía, una patrulla del Área Regional de Recursos Operativos (ARRO), que también participaba en el dispositivo, identificó al presunto violador, y lo detuvieron acusado de los delitos de agresión sexual, robo con fuerza y detención ilegal.
Después de pasar el fin de semana en dependencias policiales, el joven pasó a disposición del juzgado de instrucción en funciones de guardia este lunes. El juez lo envió a prisión provisional sin fianza, teniendo en cuenta la petición de la Fiscalía, y decretó una orden de alejamiento de 300 metros de la víctima.