La crema de contenedores se ha convertido en una auténtica lacra en Catalunya con incendios cada noche por todo el territorio que traen de cabeza a los Bombers de la Generalitat para apagar las llamas, pero también a las instituciones, especialmente ayuntamientos, que después se tienen que hacer cargo de los gastos de sustituirlos. Desde inicio de este 2024 se han quemado más de 2.600 por todo el país, lo que supone millones de euros de daños solo en contenedores, sin tener en cuenta otras afectaciones colaterales que pueden sufrir vehículos, edificios o mobiliario público. Una pequeña parte son fuegos accidentales, pero la gran mayoría son incendios provocados por vándalos y pirómanos que tienen lugar muy cerca los unos de los otros y en un corto espacio de tiempo.
Seis incendios de contenedores en una hora en Sant Vicenç de Castellet
Ejemplo de esta lacra que llena de llamas las calles de pueblos y ciudades de Catalunya es lo que se ha producido esta madrugada en Sant Vicenç de Castellet (Barcelona). En menos de una hora, los Bombers de la Generalitat han tenido que apagar seis incendios en islas de contenedores que se habían declarado a pocos metros de distancia. El primer aviso por un incendio se ha recibido a las 02.16 horas en la calle de la Llibertat, seguido de otro en la plaza del Pi solo tres minutos después, a las 02.19 horas. Después de una tregua de cerca de media hora, se han recibido dos avisos más por incendios en dos calles a tocar entre ellas, en la calle de Montserrat a las 02.46 horas y en la calle de Goya a las 02.53 horas.
La madrugada ha acabado con dos incendios más en calles próximas en otro punto de la ciudad, en la calle de Joan Cadevall a las 03.07 horas y en la calle de Sant Valentí a las 03.13 horas. En los seis casos, las llamas han podido ser apagadas sin que se tuviera que lamentar daños materiales ni personales. Los hechos se han puesto en conocimiento de las fuerzas policiales y la Policía Local de Sant Vicenç de Castellet ya ha abierto una investigación con el fin de intentar aclarar a quien hay detrás de este acto vandálico.