El pasado viernes, dos hombres cometieron lo que posiblemente es el robo más inútil del año. Y es que asaltaron una casa de la calle Sénia de Reus, en el Baix Camp, y se llevaron una bañera que vendieron en una empresa de gestión de residuos. El precio que les dieron, sin embargo, seguro que les dejó poco satisfechos: cinco míseros euros. Además, fueron detenidos pocos minutos después de consumar el robo, ya que los Mossos d'Esquadra los encontraron fácilmente; sabían perfectamente dónde buscarles.
Los hechos tuvieron lugar alrededor de las doce del mediodía de este 21 de noviembre, que es la hora a la que la policía catalana recibió el aviso de un robo con fuerza en el interior de una casa. Según los alertantes, dos hombres, de 34 y 42 años -los Mossos no han querido informar sobre las nacionalidades- saltaron un muro de unos dos metros de altura para robar esta bañera. El esfuerzo para hacerse con ella fue exponencialmente superior a las ganancias que obtuvieron finalmente.
Cuando los Mossos llegaron a la empresa de gestión de residuos, encontraron a uno de los dos delincuentes escondido fuera, mientras que al otro lo sorprendieron justo cuando salía. Tras identificarlos, los arrestaron y trasladaron a dependencias policiales. Mientras tanto, dejaron la bañera en depósito en las instalaciones para poder tramitar su recuperación y devolución al propietario legítimo.
Ambos detenidos, que suman una treintena de antecedentes policiales por delitos patrimoniales, quedaron en libertad horas después de pasar a disposición del Juzgado de Instrucción en funciones de guardia, con la obligación de presentarse ante la autoridad judicial cuando sean requeridos.
Detienen a un ladrón in fraganti en Albinyana
El sábado, un tercer ladrón fue sorprendido por los Mossos justo cuando cometía un robo en un domicilio de la calle de la Vinya, en Albinyana, en el Baix Penedès. La rápida respuesta de los agentes, que estaban en la zona realizando tareas de prevención de delitos, lo sorprendieron cuando intentaba abandonar el lugar. El hombre, de 46 años -su nacionalidad tampoco ha sido comunicada- cubría el rostro con un pasamontañas y, al verse descubierto, huyó saltando los muros de varias casas, hasta que los agentes pudieron atraparlo.
El individuo se resistió a la detención, pero finalmente le pudieron colocar las esposas y se lo llevaron a comisaría, acusado de un delito de robo con fuerza en interior de domicilio y de otro de resistencia y desobediencia a los agentes de la autoridad. Cuando lo cachearon, le encontraron encima la pata de cabra con la que había forzado la puerta de la vivienda. El hombre pasó al día siguiente a disposición judicial.
