Una mujer y su hija decidieron, el pasado 2 de noviembre, que la mejor manera de pasar juntas una tarde era entrando a robar en dos joyerías del Barri Vell de Girona. Las mujeres, de 57 y 23 años, respectivamente, españolas, se llevaron en total 800 euros en joyas que cogieron aprovechando un momento de distracción de los dependientes, después de entrar en las tiendas haciéndose pasar por clientas normales. Los Mossos d'Esquadra las han podido pillar, deteniendo a la joven y denunciando penalmente a su madre por dos presuntos delitos de hurto

La alarma la dio la segunda joyería donde robaron. Según el testimonio de las trabajadoras, sobre las cinco de la tarde estas dos mujeres entraron en el establecimiento fingiendo estar interesadas en varios anillos que había expuestos en el mostrador. Dieron a entender que querrían comprarlos e hicieron preguntas a la dependienta, quien en un momento dado se giró. Entonces fue cuando las ladronas cogieron varias joyas y, posteriormente, abandonaron el lugar sin haber comprado nada.

Al cabo de un rato, la dependienta se dio cuenta de que faltaba un puñado de joyas. Cuando revisó las cámaras de seguridad, vio cómo las personas a las que había atendido hacía poco se las llevaban y avisó a los Mossos sobre el robo. Casualmente, la policía catalana recibió otra denuncia el mismo día de una segunda joyería donde las trabajadoras relataron el mismo escenario. 

Pilladas días después gracias a las cámaras

Con esta información, los Mossos pusieron en marcha una investigación para poder identificar y localizar a las sospechosas. Con las imágenes que tenían de las cámaras no fue difícil averiguar su identidad y, el pasado 7 de noviembre, procedieron con la detención y denuncia de madre e hija. 

En cuanto a las joyas, pudieron ser recuperadas y devueltas a las respectivas joyerías. Está previsto que la joven arrestada, sin antecedentes hasta ese momento, y su madre, pasen a disposición del Juzgado de Instrucción en funciones de guardia de Girona cuando sean requeridas.