La geolocalización de los aparatos electrónicos se está volviendo en un elemento clave para poder seguir la pista de los ladrones después de que cometan sus robos. Eso mismo es lo que ha pasado en Castelldefels, en el Baix Llobregat (Barcelona), donde la Policía Local ha podido capturar a dos delincuentes que se habían llevado dos patinetes eléctricos. Además de ladrones, sin embargo, se descubrió que los individuos también se dedicaban a la venta de sustancias estupefacientes, motivo por el cual también han podido ser acusados de un delito contra la salud pública por tráfico de drogas.
La geolocalización de uno de los patinetes lleva a la policía hasta un hotel
Los hechos tuvieron lugar el pasado viernes, cuando una mujer fue a comisaría para denunciar el robo de los dos patinetes eléctricos. Los investigadores de la Policía Local siguieron el sistema de geolocalización que llevaba incorporado uno de los dos vehículos de movilidad personal y lo pudieron situar en un hotel del mismo municipio. Así pues, los agentes municipales se desplazaron hasta el establecimiento, donde pudieron localizar y recuperar el patinete indicado. El otro, sin embargo, no se encontró. El presunto autor del robo también pudo ser identificado y quedó detenido.
No obstante, cuando inspeccionaron la habitación donde se estaba alojando con otro compañero, los efectivos policiales descubrieron que tenían una partida de hachís y una gran cantidad de dinero en efectivo. Concretamente, se encontraron 2,8 kilos de hachís y 19.800 euros en efectivo repartidos en decenas de billetes de entre 5 y 50 euros. Ante estas evidencias, los dos individuos, jóvenes de nacionalidad española, fueron detenidos por un presunto delito contra la salud pública y fueron trasladados a comisaría a la espera de pasar a disposición judicial, mientras que la droga y el dinero quedaron intervenidos.