La inteligencia artificial (IA) puede ser un arma peligrosa si cae en las manos equivocadas. Varias mujeres han denunciado ante los Mossos d'Esquadra que hay grupos de hombres en Telegram que se envían fotos de ellas, que previamente habrían sacado de sus perfiles de Instagram, y que habrían modificado con aplicaciones de IA para que aparecieran desnudas. También había vídeos, editados sin su consentimiento, que convertían en material pornográfico y, además de la app de mensajería, una de las denunciantes llegó a ver fotos suyas subidas en las redes sociales.

Pero no acaba aquí la cosa. El grupo de Telegram, formado por unos 1.000 usuarios, casi todo hombres ocultos detrás de seudónimos, preguntaban cada día si podían desnudar a una mujer, de la que pasaban una fotografía, en gran parte de los casos, sacada de Instagram o de otra red social. Así lo ha explicado TV3, que ha hablado con dos de las víctimas y ha publicado algunas de las conversaciones al chat sexual con frases como: "¿Alguien se quiere hacer una paja con Jana (nombre ficticio)?". La chica leyó mensajes como este en un grupo de la aplicación de mensajería que llevaba su nombre y apellido, además de comentarios vejatorios e insultos y vídeos de los usuarios masturbándose con una foto suya modificada con IA.

Denuncia el grupo de Telegram y la facilidad de la IA para editar fotos

Ella lo denunció ante los Mossos d'Esquadra y descubrió que algunos miembros del grupo eran conocidos suyos del pueblo o compañeros de profesión. El grupo todavía continúa activo y no ha sido la única víctima: hay otros chats en las que las víctimas son compañeras de Jana, según ha apuntado la cadena citada, que siguen el mismo modus operandi: utilizando la inteligencia artificial. Editar fotografías con las nuevas tecnologías es muy fácil e incluso poner efectos como simular que han eyaculado sobre el cuerpo o la cara de la víctima. Pero estas conductas pueden provocar graves traumas psicológicos a las afectadas que van desde el insomnio y la paranoia hasta no querer salir de casa nunca más o sufrir un trastorno alimentario.