Escándalo sexual en Estados Unidos. Con Heiry Calvi, una maestra arrestada el viernes por tener relaciones sexuales con un alumno y quien está embarazada, ya son tres los educadores en el condado Miami-Dade, en el sur de Florida, detenidos en lo que va del mes y que enfrentan cargos de agresión sexual en tres hechos aislados.
La última, Heiry Calvi
Calvi, de 41 años, fue arrestada el viernes tras una investigación de siete meses, Brittiny Victoria Lopez-Murray, de 31, el lunes pasado, y Daniel Fernández, de 36, el pasado 1 de octubre.
Las autoridades detallaron que Calvi, maestra del Centro John I. Smith de la ciudad de Doral, está acusada de agresión sexual a un menor de 14 años y desconocen si este es el padre de bebé que espera.
Según el Departamento de Policía de Doral, la víctima usaba las redes sociales para comunicarse con Calvi y ambos habían asistido a una fiesta juntos en la que dijeron ser sobrino y tía.
Los detectives reconocieron al estudiante en un video en el que aparecían ambos desnudos y que el joven estaba mostrando a sus compañeros.
Dos profesores más
Entre tanto, López-Murray, de 31 años, maestra de teatro de una escuela secundaria de Hialeah, enfrenta 25 cargos de agresión sexual a otro menor de 14 años en los últimos dos meses. Lopez-Murray ingresó a una cárcel el pasado lunes por la noche.
Según la agencia RT, la relación entre la profesora y el menor se descubrió cuando el padre y la hermana del joven encontraron en el teléfono del menor imágenes inapropiadas de la docente y mensajes de contenido sexual entre ambos, por lo que fue reportado a la policía.
En su presentación frente la jueza Mindy S. Glazer, Brittiny Lopez-Murray escuchó los cargos de los que se le acusa, al tiempo que le fue dictado un alejamiento del menor a través del nulo contacto ya sea virtual o físico.
Por su parte, Fernández, de 36 años, un maestro de música de la Escuela Charter Intermedia Renaissance, está acusado de asalto sexual, besar y acariciar, a una estudiante de 14 años.
Fernández fue arrestado el viernes y liberado de la cárcel con una fianza de $ 7,500 después de que un juez le ordenó el sábado que no tuviera ningún contacto con la víctima y que se mantuviera alejado de la escuela. Un informe de arresto dijo que confesó a los investigadores después de su arresto.