Terrible caso de maltrato infantil en Almería. Una mujer ha sido enviada a la prisión de manera provisional y sin fianza para ser la presunta autora de un delito de lesiones en el ámbito familiar contra su hija de 16 meses. La pequeña se encuentra ingresada en la Unidad de Cuidados Intensivos (UCI) pediátrica del Hospital Universitari Torrecárdenas a causa de las múltiples fracturas y heridas de diversa consideración que presenta por todo el cuerpo. Según las primeras informaciones, la pareja de la madre también habría participado de las torturas, y, asimismo, ha ingresado en la prisión.
El Juzgado de Instrucción número 2 de Almería considera probado que las agresiones se han producido durante un periodo de tiempo extenso. El último episodio de maltrato tuvo lugar el pasado 25 de marzo. La bebé tuvo que ser trasladada de urgencia al hospital con "una herida en el lóbulo de la oreja derecha y el pabellón de la izquierda, hematomas en la cara y en el ojo izquierdo, inflamación del tabique nasal, múltiples hematomas en la cabeza, arañazos por todo el cuerpo, fractura en el peroné izquierdo, fractura en la tibia derecha y múltiples fracturas en el peroné derecho", según el informe médico. Al llegar al centro médico la tuvieron que someter a una intervención de urgencia por las fracturas en las piernas.
Desde el hospital denunciaron que la pequeña sufría maltrato infantil
El diagnóstico de la niña era tan grave que los sanitarios sospecharon que las lesiones habían sido infligidas de manera deliberada. De la misma manera, al revisar el historial médico de la menor se dieron cuenta de dos ingresos anteriores, los días 8 y 13 de marzo, también con varios moratones y fracturas. Por todo eso, desde el hospital avisaron a la Policía Nacional, denunciando que la bebé podía estar sufriendo maltrato en su casa. Los agentes detuvieron el mismo día a la madre y a su pareja.
Durante la vista judicial, los acusados negaron los maltratos, pero a sus declaraciones les faltaba claridad y estaban llenas de contradicciones. Lo mismo pasó con los testimonios de otros familiares. Por todo eso, la magistrada titular consideró que habían incurrido de manera habitual en un delito de lesiones graves contra una persona especialmente vulnerable por su corta edad, y que existían indicios que hacían pensar que podrían reincidir si los dejaba en libertad. Por eso, consideró oportuno enviarlos a ambos a la prisión de manera provisional hasta la celebración del juicio.