Pillan a unos calçotaires ilegales. Los Mossos d'Esquadra han parado una furgoneta donde viajaban diferentes personas que iban a recoger calçots en los campos de la comarca ilerdense de las Garrigues. Pero, para sorpresa de los agentes, todos los trabajadores que estaban dentro del vehículo no tenían permiso de trabajo para recolectar estas cebollas tiernas, tan populares durante los primeros meses del año, en los cultivos del propietario. Por ello, la policía ha denunciado penalmente al empresario por un supuesto delito contra los derechos de los trabajadores.

Siete personas dando vueltas por los campos para recoger calçots

Los hechos tuvieron lugar el pasado miércoles, 26 de febrero, cuando una patrulla dio el alto a una furgoneta que había hecho unas maniobras extrañas al percatarse de la presencia policial en la calle de la Estación de Les Borges Blanques (Lleida). Lo primero que comprobaron los agentes fue el permiso de conducir y vieron que no era válido en España y que en el interior del vehículo viajaban otras siete personas que no que hablaban catalán ni castellano. Poco después, el conductor aseguró que eran trabajadores del campo y que los trasladaba de una finca a otra.

Los siete trabajadores que iban en la furgoneta no podían comunicarse con los Mossos d'Esquadra, por lo que los agentes les pidieron la documentación y muchos de ellos iban sin ningún tipo de identificación. La principal sospecha de la policía es que se podían estar vulnerando sus derechos y, por ello, los trasladaron a todos hasta dependencias policiales para llevar a cabo las correspondientes indagaciones, tras denunciar penalmente al conductor de la furgoneta por circular sin haber obtenido nunca el carné.

El empresario de los calçots se presenta en comisaría

Una vez en comisaría, poco después, llegó un empresario de la comarca ilerdense de las Garrigues y aseguró que los siete trabajaban en unos campos de su propiedad recogiendo calçots. Más tarde reconoció que no estaban contratados legalmente porque no tenían permiso de trabajo, aunque aseveraba estar en trámites para regularizarlos. Aun así, y ante esta situación, los Mossos d'Esquadra instruyeron diligencias por un delito contra los derechos de los trabajadores, informando, además, de los hechos a Inspección de Trabajo y a la Policía Nacional, al tener las competencias en Extranjería, por la situación irregular de estas personas en territorio español.