Pillados cuando intentaban robar en el restaurante de Masterchef en Madrid. La Policía Nacional ha detenido a tres hombres, de 29, 34 y 35 años, dos de nacionalidad española y uno marroquí, en el momento de asaltar el conocido establecimiento situado en el número 150 de la calle Velázquez del distrito madrileño de Chamartín. Los hechos tuvieron lugar este sábado de madrugada, hacia las tres, cuando la Sala del 091 recibió el aviso de la alarma del establecimiento, por lo que varias patrullas se desplazaron hasta el lugar inmediatamente y los agentes sorprendieron a los tres supuestos ladrones con las manos en la masa.

Capuchas, inhibidores de frecuencia y palancas: un robo fallido

Los tres hombres, con numerosos antecedentes policiales por hechos similares, tenían como objetivo robar en el restaurante Masterchef de Madrid, según ha avanzado El Mundo, y para ello iban completamente equipados. Tanto es así que cuando los agentes llegaron al establecimiento, vieron a tres individuos en el exterior de la puerta de servicio, que se encontraba abierta, vistiendo guantes en las manos y gorros o prendas con capucha para poder ocultar su identidad. Aunque lo más sorprendente fue lo que la Policía Nacional encontró poco después: desde inhibidores de frecuencia hasta palancas.

La Policía Nacional, ante tales evidencias, identificó a los tres hombres y procedió al registro, tanto de ellos como del vehículo en el que habían llegado hasta el restaurante y con el cual, supuestamente, pretendían huir. Los agentes encontraron dos inhibidores de frecuencia, utilizados en muchos casos para evitar que salte la alarma del sitio que van a asaltar y, de hecho, uno de ellos estaba encendido. Pero, en este caso, parece que no funcionó y sí se activó cuando intentaron entrar. También había una palanqueta en el coche, dos destornilladores y otras herramientas variadas para abrir puertas. 

Sin tiempo para robar: llevaban menos de cien euros encima

Los ladrones no lograron llevarse nada del restaurante de Masterchef, tan solo llevaban en el bolsillo unos pocos billetes de veinte y diez euros y monedas sueltas, según ha detallado el medio citado, que no sumaban más de ochenta euros. Las cámaras de seguridad muestran que el problema, fundamentalmente, es que no les dio tiempo de actuar ante la rápida intervención policial. Ni siquiera pudieron forzar la caja registradora. La Policía Nacional detuvo a los tres hombres acusados de un delito de robo con fuerza y fueron trasladados a dependencias policiales a la espera de que pasen a disposición judicial.