La peste que emanaba de un piso de la calle de Torres Torres de València ha revelado una situación muy macabra este viernes por la mañana. Y es que, en uno de los pisos del número 18 de la mencionada calle, una mujer de 60 años hacía más de un mes que convivía con el cadáver momificado de su madre, que en el momento de la defunción tenía 95 años. Durante este tiempo, hizo creer a los vecinos que la anciana estaba enferma y no salía a la calle debida al delicado estado de salud que tenía. Una familiar, preocupada por el fuerte olor, intentó entrar dentro de la vivienda; cuando la mujer se lo impidió, amenazó con llamar a la policía y fue entonces que pudo acceder y encontró el cuerpo sin vida.

La familiar, sobrina de la difunta, avisó inmediatamente al teléfono de emergencias 112 que envió a una patrulla de la Policía Nacional. A simple vista, la muerte de la anciana no había sido violenta y no tenía ningún indicio externo de criminalidad. De todos modos, será la autopsia la que aclare las causas. Mientras trasladaban el cadáver al anatómico forense, la hija fue conducida a comisaría para interrogarla sobre la muerte de su madre y sobre por qué no avisó a los servicios de emergencias cuando murió. Según las primeras estimaciones, la mujer hacía más de un mes que estaba muerta, posiblemente desde el pasado 6 de diciembre.

Una posible estafa y problemas mentales

Los vecinos de las dos mujeres han explicado que madre e hija a menudo se peleaban y que la más joven hacía un tiempo que no trabajaba por estar de baja por depresión. En alguna ocasión se tuvo que llamar a la policía por los gritos que se oían desde dentro del piso, según han explicado algunos de los inquilinos de la finca a Las Provincias. A pesar de eso, no consideran que la hija fuera una persona violenta, y no se explican cómo llegó a convivir durante tanto tiempo con el cadáver de su madre.

La investigación, que ha asumido el Grupo de Homicidios de la Policía Nacional, se centra en una posible estafa que habría dejado a la hija de la difunta sin dinero, perturbándola a nivel mental además de la depresión con la cual lidiaba. Eso es lo que se ha deducido después de que la única explicación que diera fuera que "no tenía dinero". La familia, sin embargo, no tenía constancia de que estuviera pasando por una mala situación económica, por lo cual, que alguien se haya hecho con su dinero de manera fraudulenta es la teoría que tiene más peso a estas alturas.